Detienen al cabecilla de un clan familiar por estafas reiteradas con el timo del tocomocho

El arrestado, un hombre de 46 años que responde a las iniciales
J. F. P. S., perpetró tres fraudes en Zaragoza recientemente.

Un hombre de 46 años, identificado como J. F. P. S., fue detenido el miércoles en Madrid como presunto autor de tres estafas «perpetradas en fechas recientes en Zaragoza» con el timo del tocomocho. La Policía Nacional cree que se trata del principal integrante de un grupo organizado de carácter familiar que actúa en España desde hace años «de forma continua y sistemática».


Los agentes de la comisaría de distrito de San Blas actuaron a requerimiento de la Jefatura Superior de Policía de Aragón, dado que la investigación fue desarrollada por miembros del Grupo de Delincuencia Económica de la Brigada Regional de la Policía Judicial de Zaragoza.


En el tocomocho intervienen varias personas, que se mueven de ciudad en ciudad para no levantar sospechas y obtener mayores ganancias. Repartidos los papeles, los timadores eligen minuciosamente a la víctima –por lo general, una persona de avanzada edad–, y uno de ellos, apodado policialmente como ‘el tonto’, le aborda y le solicita ayuda para ir a un determinado punto de la ciudad. Habitualmente, suelen hacerse pasar por personas de aspecto descuidado, analfabetos e incautos para ganarse la confianza de sus víctimas.


Entablada la conversación, piden información sobre una determinada administración de lotería para cobrar unos décimos premiados. A continuación, entra en escena una segunda persona –el gancho–, que comunica al afectado que el boleto que le han enseñado ha sido premiado. Tras aparentar que se ha dirigido a una administración de lotería, convence a la víctima de que la operación que está haciendo es muy beneficiosa y de que pueden quedarse con uno de los billetes si ambos –timador y timado– le entregan una cantidad de dinero.


El dueño del décimo premiado pide a la víctima un adelanto para poder confiar en ella. El gancho, aparentando previamente ir a un banco a sacar dinero, lo hace sin dudar e insta al afectado a que haga lo mismo. En algunos casos, llegan a acompañarle a su casa a recoger la libreta. También le piden joyas y otros efectos de valor.


Al salir del banco, los timadores proceden a introducir el dinero en un sobre junto con el décimo premiado, que entregan a la víctima (previo cambiazo). Dicho envoltorio esconde papeles de periódico que simulan ser billetes, pero la víctima no se da cuenta hasta que minutos más tarde.


La Policía Nacional recomienda a las personas de edad avanzada desconfiar de quienes se acerquen a ellos en la calle manifestando haber sido agraciados con un premio de lotería o exhibiendo una gran cantidad de billetes. En esos casos, aconsejan dar avisto a través del 112 o comunicarlo a una patrulla policial.