El panorama de la calle más comercial del barrio de Jesús, en Zaragoza, es desolador. La calle de Jesús es sinónimo de persianas echadas y carteles de 'se alquila', 'se traspasa' o 'se vende' y solo seis pequeños comercios de la zona sobreviven al paso de tiempo.

Pili y su marido regentan desde hace nueve años una vistosa frutería en esa calle. La pareja cuenta que, en los últimos seis años, sus ventas han bajado un 50% y su clientela un 25%. "Nunca hemos pensado en cerrar pero muchos lo han hecho y los locales llevan vacíos muchísimo tiempo", lamenta la frutera.

Un poco más arriba, en la calle de la Estación, los puestos de Manuel y María José son los únicos supervivientes del mercado del barrio. El carnicero, conocido por sus vecinos como Manolo, relata cómo se fue quedando solo en el recinto poco a poco: "Cuando abrí en 2003 había cinco tiendas más pero en dos años cerraron todas porque la clientela de toda la vida va desapareciendo y la gente joven prefiere los supermercados". La pescadería de María José es el único negocio que ha apostado por el humilde mercado en los últimos años, una bendición para Manuel, que al menos desde 2007 ya no está solo.

Tino, el 'panadero novato' venido del sector de la construcción, sí admite haber pensado en cerrar porque la cosa en el barrio va "peor imposible", según comenta. Sin embargo, resiste como puede "porque la inversión para abrir el negocio hace tres años fue grande".

Esperanzas puestas en el PICH

La asociación de vecinos del barrio es consciente del problema y ha marcado la revitalización comercial de la zona como su principal objetivo. Raúl Gascón, presidente de la agrupación vecinal, espera que la recién lograda inclusión del barrio en el Plan Integral del Casco Histórico (PICH) ayude a cambiar las cosas. Esta decisión, tomada en octubre en el pleno del Ayuntamiento de Zaragoza, se hará efectiva a lo largo del mes de enero, después de que se suspendiese el último pleno del consejo sectorial del mes de diciembre.

"El fomento del comercio de proximidad es el primer tema que vamos a tratar -anuncia Gascón-, a ver si podemos lanzar campañas para promoverlo con descuentos o con publicidad del tipo 'Compra en tu barrio' y cambiamos las cosas, porque los pobres comerciantes que quedan van subsistiendo como pueden".

La inclusión en el PICH era una de las grandes reivindicaciones del barrio de Jesús porque, tal y como explican desde la asociación de vecinos, confían en que las herramientas que proporciona el Plan sirvan para lograr poner en marcha de nuevo la vida comercial de la zona.