"Este parque infantil es una auténtico lodazal"

“Los grandes charcos que se forman en el parque en cuanto caen cuatro gotas impiden que los niños puedan jugar. Ya no solo es cuestión de que se manchen, es que son tan grandes que pueden incluso resultar peligrosos para los más pequeños”. Estas son las palabras de José Ignacio P., un vecino del Picarral, que denuncia el estado en el que se encuentra un área de juegos infantiles, sita en la avenida de Salvador Allende, justo detrás del Colegio Público Zalfonada.

“Hace unos años trajeron un camión de arena y lo volcaron, sin más. Desde entonces las simas son cada vez más grandes. Parecen agujeros negros”, apunta Pilar E., que tiene tres hijos con los que, “cuando el agua y el estado del parque lo permiten”, suele acercarse al área infantil.

Igual que Pablo S., que también reside en el entorno. “Es totalmente inconcebible que una zona para niños, tan cercana a un colegio y a un instituto, esté en estas condiciones tan deplorables. Y no vamos a hablar de la sombra, inexistente en los meses de más calor, por la falta de árboles en esta zona en concreto”, comenta el zaragozano.

Una situación a la que ya “hace algunos años” intentaron poner solución desde la Asociación de Vecinos Picarral Salvador Allende, poniéndolo de manifiesto en la junta de distrito. “Hay ocasiones en las que sí se ejecutan las mejoras que solicitamos, pero está claro que el mantenimiento de este parque, de tierra compactada, en concreto continúa siendo una deuda pendiente”, comenta Juan José Jordá, portavoz del colectivo. “Es cierto que se generan grandes charcos en cuanto llueve un poco y con la cantidad de lluvia que ha caído en los últimos meses el problema se ha agravado, ya que también se han visto afectados los pasos intermedios de la zona verde, por la que a diario transitan los vecinos”, explica Jordá, quien asegura que, desde la agrupación vecinal van a volver solicitar, en la junta municipal, “las correspondientes mejoras”.

Por su parte, desde el Ayuntamiento explican que “en cuanto sea posible, los técnicos pasarán a rellenar los agujeros para prevenir la creación de charcos”.