Los taxistas se quejan de la movilidad

"Parece que no somos servicio público para el Ayuntamiento"

Los giros prohibidos en el eje del tranvía y la prioridad semafórica, que convierte a algunas calles en trayectos eternos, son las principales quejas de los taxistas.

Un taxi en Zaragoza
523 infracciones en 193 carreras de taxis
ESTHER CASAS

A pocas semanas de inaugurarse el trazado completo de la línea 1 del tranvía, las quejas por los cambios en la movilidad de Zaragoza se reavivan. Uno de los colectivos que más descontento está con las modificaciones es el de los taxistas. El gremio se queja de que su trabajo se ha visto seriamente afectado por, entre otras cosas, la prioridad semafórica que tiene el tranvía y los giros que tienen prohibido realizar a lo largo del eje.


“Parece que para el Ayuntamiento de Zaragoza los taxis no somos servicio público”, dice un taxista zaragozano. Se queja de los giros prohibidos a la izquierda a lo largo del eje del tranvía y de las prioridades de los semáforos en Independencia. “Desde la plaza de España hasta la de Paraíso si hay tráfico y pillas algún autobús, puede costarte salir, fácil, unos 15 minutos”, indica.


Los taxistas sostienen que los clientes a veces creen que les están engañando por el tiempo que emplean y el trazado que tienen que realizar para cubrir algunas carreras.


Otro de los cambios que peor ha sentado al gremio ha sido la prohibición del giro a la izquierda en el puente de Santiago viniendo por el paseo Echegaray y Caballero desde la plaza de Europa. "Es un giro permitido a autobuses de Tuzsa y también a autobuses de turistas", se queja un taxista, "y a nosotros, que también somos servicio público, se nos prohíbe", añade.


También les preocupa el número de paradas existente en la actualidad. Según su opinión, hace falta que el Consistorio zaragozano establezca más paradas. Además, se quejan de que en el Actur, tras las obras del tranvía, les resulta muy difícil parar para coger o dejar viajeros.


El Ayuntamiento escucha a las demandas del gremio

Fuentes del Ayuntamiento de Zaragoza confirman que hay un diálogo constante y fluido con los taxistas en materia de movilidad. “Por ejemplo, se ha recogido su petición de fijar los nuevos límites de retorno (punto a partir del cual cambia la tarifa urbana normal a otra distinta) coincidiendo con los límites del Cuarto Cinturón”, señalan.


Sin embargo, hay otras peticiones en las que cuesta llegar más a un punto en común porque, señalan desde el Consistorio, "es necesario conjugar el interés de los taxistas con los de otros colectivos". (repartidores, peatones, ciclistas, etcétera). Es el caso de la ubicación de las paradas de taxi.


Con respecto a la autorización de los taxistas los giros a la izquierda en el eje del tranvía, la opinión del Servicio de Movilidad del Ayuntamiento es contraria. "Debe primar la seguridad vial", insisten.


En todo caso, remarcan desde el Consistorio, hasta ahora solo se han celebrado reuniones técnicas y no ha habido ningún pronunciamiento formal por parte de los técnicos municipales.


Un calendario de movilizaciones... Sin convocante

Hace días que en las instalaciones de la cooperativa Auto-Taxi de Zaragoza se han podido ver unas hojas informativas que invitan a los taxistas a movilizarse durante la semana que viene.


Esta convocatoria no viene respaldada por nadie. Los taxistas consultados desconocen quién puede estar detrás y la Asociación Provincial de Taxistas de Zaragoza ha negado cualquier relación con ella.


Las hojas en cuestión animan a todos los taxistas a dar servicio preferente a determinadas zonas de la ciudad durante dos horas (de 11.00 a 13.00) todos los días de la semana que viene: el lunes 18 y el viernes 22, la zona Actur (avenidas de María Zambrano y Gómez de Avellaneda); el martes 19, el paseo de María Agustín; el miércoles, el eje puerta del Carmen-plaza de Paraíso-paseo de la Independencia; y el jueves 21, la zona de El Corte Inglés (el folleto no especifica cuál).


Según señalan varios taxistas, el objetivo de esta singular protesta es colapsar estas zonas de la ciudad. Si muchos compañeros acuden a la misma hora a los lugares indicados, indican, el tráfico se complicará mucho y nadie quedará indiferente.


Esta convocatoria se ha extendido de forma desigual entre los taxistas y aunque el descontento con la situación actual que vive el gremio es generalizado, muchos han mostrado sus recelos a apoyarla. El argumento más utilizado al respecto es que no saben quién está detrás de la iniciativa y no van a respaldar nada que no sepan de dónde viene.