Informe elaborado entre julio y septiembre

Más de 240 jóvenes multados en Zaragoza por hacer botellón

Un porcentaje importante de estas sanciones se han impuesto por causar molestias a terceros y han desembocado en trabajos comunitarios.

Botellón en la plaza de Salamero
Más de 240 jóvenes multados en Zaragoza por hacer botellón
M. SANTONJA

Un porcentaje importante de las más de 240 sanciones que se han impuesto a jóvenes en Zaragoza por participar en 'botellones' -por causar molestias a terceros-, se han traducido en trabajos en beneficio de la comunidad. 


Precisamente facilitar el cumplimiento de sanciones con trabajos en beneficio de la comunidad desde los 14 años es una de las propuestas de un informe elaborado a petición del Ayuntamiento de Zaragoza por Carlos Gómez Bahillo y Eva Ezquerro Villarroya, de la Universidad de Zaragoza.


El consejero de Cultura, Jerónimo Blasco, ha presentado este lunes con Gómez Bahillo las conclusiones de ese estudio, elaborado entre julio y septiembre con la participación de 34 representantes de instituciones, seis jóvenes mayores de edad y 28 menores, que incluye numerosas alternativas para aminorar el fenómeno del botellón, que se genera ante la carencia de espacios en los que los jóvenes puedan reunirse en grupo sin que les suponga un coste económico demasiado elevado.


Las alternativas, que deben implicar a familias -que en ocasiones no ven la realidad-, instituciones educativas, administraciones públicas y jóvenes, incluyen propuestas educativas y formativas -entre ellas que haya orientadores nocturnos que entren en contacto con los jóvenes y les informen de otras actividades en la ciudad-, incrementar las campañas formativas en los centros educativos sobre los efectos del consumo de alcohol, y aumentar la información sobre los beneficios que proporcionan para la salud la dieta mediterránea y el consumo responsable de alcohol.


También fomentar la formación medioambiental sobre la importancia de la gestión de residuos y utilizar las redes sociales para contactar con los jóvenes para que conozcan las actividades a su disposición cada semana.


Como medidas persuasivas, se plantea, entre otras, facilitar el cumplimiento de las sanciones con trabajos en beneficio de la comunidad desde los 14 años e informar al joven y a su familia del coste que representa ser atendido por intoxicaciones etílicas en los servicios públicos de salud.


También incrementar el control sobre los locales y bazares que venden alcohol, y el sanitario sobre la calidad de las bebidas que se dispensan en los locales de ocio.


Como medidas alternativas de ocio y tiempo libre, se considera la posibilidad de modificar la limitación de edad para el acceso a conciertos, reducir a los 16 años la edad permitida para el consumo de determinadas bebidas en bares y discotecas y ensayar la puesta en marcha de proyectos de ocio en horario nocturno por asociaciones en algunas casas de juventud.


Asimismo, se plantea el aprovechamiento de otras instalaciones municipales y de centros de enseñanza secundaria para actividades de ocio juvenil.


La práctica totalidad de quienes han participado en el estudio se oponen a la creación de 'botellódromos', incluidos la mayoría de los jóvenes, por el posible aumento de altercados, inherente a las macroconcentraciones de personas de toda índole, además del posible incremento de consumo de drogas y de que se produzcan accidentes de tráfico.


Se trata de un documento de partida que esperan cerrar a finales de octubre o noviembre, ha dicho Blasco, quien ha apuntado que el ayuntamiento intentará poner en marcha las medidas que se acuerden que son de su competencia.