Piden 17 años por una agresión sexual en Zaragoza

Un hombre se ha enfrentado este martes en la Audiencia de Zaragoza a penas que suman 17 años de prisión como presunto autor, en compañía de un cómplice que no llegó a ser identificado, de una agresión sexual en la parte trasera de un vehículo que se prolongó por espacio de más de dos horas.

La supuesta violación tuvo lugar a las 04.20 horas de la madrugada del 30 de diciembre de 2010 en la avenida de Madrid de la capital aragonesa, cuando la víctima se disponía a coger su coche para desplazarse a su puesto de trabajo en Mercazaragoza.

Según la denunciante, el acusado, Christian C., de nacionalidad nigeriana y trabajador de la construcción, y su cómplice se acercaron a ella y le obligaron a subirse a la parte trasera del vehículo, donde se produjo el supuesto asalto sexual.

El sospechoso fue detenido el pasado mes de marzo, al introducirse en un registro informático muestras de adn del procesado relacionadas con otro hecho delictivo y concordar con las tomadas un año y medio antes en el escenario de la presunta violación.

Durante la vista, la víctima ha relatado que los dos agresores le golpearon en la espalda para vencer su resistencia mientras se sucedían de forma consecutiva en la agresión, y le amenazaron posteriormente con "matar" a los miembros de su familia si denunciaba los hechos.

Ha añadido que con las primeras luces del amanecer y el tránsito de gente en la calle, los asaltantes salieron del coche y se marcharon del lugar, momento que aprovechó para echar el cierre del vehículo y vestirse.

Por su parte, el acusado ha negado la acusación y ha manifestado que había quedado con la mujer para comprarle droga, tesis que, sin embargo, no ha sido utilizada por la defensa en su interrogatorio a la mujer.

Los peritos forenses han asegurado que la mujer no presentaba lesiones en sus órganos genitales ni restos orgánicos sino dos hematomas menores en su pierna izquierda, pero han explicado al tiempo que su estado psicológico en el momento de ser atendida era de agitación y miedo.

Otros peritos policiales han explicado que en un pañuelo propiedad del procesado que fue localizado en la parte trasera del vehículo se encontraron rastros de esperma con su adn mezclados con otros de la denunciante.

El fiscal ha tipificado los hechos como un presunto delito de violación y otro de robo, ya que a la mujer le fueron robados dos teléfonos móviles y diversas joyas, por los que ha solicitado, respectivamente, penas de 14 y de 3 años de cárcel.

Por su parte, la defensa ha reclamado la puesta en libertad de su cliente al entender que la ausencia de lesiones y de restos orgánicos en el cuerpo de la mujer no evidencian la comisión de una presunta agresión sexual.