Población

La edad de los barrios marca sus reivindicaciones

La edad de cada zona de la ciudad no se mide por las arrugas sino por las necesidades y las reivindicaciones que las asociaciones hacen al Ayuntamiento.

Actur, uno de los barrios más jóvenes
La edad de los barrios marca sus reivindicaciones
A. A. C.

Más de 700.000 habitantes conviven día a día en la ciudad de Zaragoza. Un 21% de ellos son niños y jóvenes de entre 0 y 19 años, un 63% son adultos y un 15% superan la edad de los 65, según datos de la página web del Ayuntamiento de Zaragoza. Pero la distribución no es igual en todos los barrios.


Las áreas más envejecidas, entre las que se encuentran el Centro, Torrero y San José, reclaman más centros de día y residencias, mientras que los más jóvenes, como el Actur, Miralbueno y Valdespartera, demandan guarderías e instalaciones deportivas.


Centros de mayores para las zonas más envejecidas

Desde el distrito Universidad (19%) hasta Las Fuentes (18%) pasando por San José (22%), Delicias (18%), Torrero (16%), Centro (21%) y Casco Histórico (17%). Estas áreas están marcadas por una población envejecida, con más del 15% que supera los 65 años, y que necesita unos servicios acordes a sus necesidades.


En Torrero la población anciana representa un alto porcentaje, más de 6.000 personas de sus 37.730 habitantes tienen más de 65 años.


Desde la Asociación de Vecinos Venecia, parte de este distrito, reclaman la necesidad de algún centro cívico y de convivencia ya que "desde la calle Sierra Purroy no hay ninguno".


Su presidente, Javier Grassa, añade a esta demada la de un comedor popular porque "con la que está cayendo" las familias lo necesitan.


El centro de salud Canal Imperial, que corresponde a este área de la ciudad, funciona bien "de momento", cuenta la asociación. "Vamos tirando, justitos, pero vamos". Javier Grassa recuerda que con la llegada de más habitantes a Puerto Venecia los horarios del centro no serán suficientes para dar servicio a todo, "o abren por la tarde o no llegarán", añade.


Pero la población más joven también reclama sus servicios. Llevan tiempo reivindicando el edificio de la cárcel como espacio cultural y de conciertos. "Tal y como están las arcas -explica Grassa-, no le veo futuro, se van a olvidar de nosotros". A lo que suman su solicitud de ampliación del servicio Bizi. "No entendemos por qué no llega hasta aquí, hace años que contamos con carril bici", concluye.


Otra de las zonas más envejecidas de la ciudad es la del Casco Histórico con un 17,35% de población que supera los 65 años. La Asociación de vecinos Juan Lanuza Casco Viejo asegura que cuentan con numerosos servicios para atender a los más mayores. Dos centros de día, la Casa de Amparo, un comedor con precios públicos y un servicio de comida a domicilio.


Javier Rodríguez, el presidente de esta organización, afirma: "Todo se puede mejorar, quizás los centros estén un poco saturados, pero en general tenemos bastantes servicios". Además, presumen orgullosos del centro de salud San Pablo, que "es un centro modélico, que trabaja con el barrio", asegura Rodríguez.


El barrio Jesús, uno de los más antiguos, se divide en tres partes. La más envejecida, con cerca de un 20% de la población mayor de 65 años, según datos de la Asociación de Vecinos del Barrio de Jesús, comprende desde el Puente de Hierro hasta el de Piedra.


Aunque hay alguna renovación puntual, cuenta el tesorero de la organización, Óscar Pérez: "Urbanísticamente está muy degradada y los edificios no están acondicionados". "Existen casas con cuatro pisos sin ascensor", añade.


Lo que más demandan los vecinos en esta zona son servicios asistenciales, centros de día y residencias.


Guarderías y centros de salud en las áreas de nueva creación

En su parte más reciente y, a la vez, más joven, la de la Azucarera, destaca la presencia de parejas con niños pequeños. Por tanto, explica Pérez, su mayor reclamo son las guarderías públicas, inexistentes en la zona y más plazas escolares. "Llevamos años y años con lo mismo, hay más demanda que plazas disponibles", recuerda.


También asegura la asociación que, ante la falta de un centro de salud propio, las familias deben acudir al de la Jota, que "está totalmente saturado". "Si es para 20.000 personas estamos acudiendo cerca de 38.000 usuarios", concreta el tesorero.


En la parte intermedia, del paseo Longares, hay gran cantidad de adolescentes y jóvenes por lo que necesitan instalaciones deportivas y de ocio para "habilitar una alternativa a estos chavales en el barrio, más allá de pasear por las calles", conluye Pérez.


Apuesta por la educación en los barrios jóvenes

El barrio del Actur, uno de los más jóvenes de la ciudad con un 27,7% de menores de 19 años, de las casi 60.000 personas que lo pueblan, ha ido ampliando sus infraestructuras poco a poco.


Su principal reclamo ahora es un centro de atención sanitaria especializada, "se nos viene prometiendo desde hace 14 años, ya tiene espacio y diversas partidas presupuestarias que se han ido incumpliendo", explican desde la Asociación de Vecinos Puente de Santiago-Actur.


Para los más de 13.000 niños, de 0 a 14 años, con los que cuenta el barrio, el presidente de la asociación, Julio Murillo, reclama: "Atención y equipamientos públicos específicos como ayudas a las familias, becas y más escuelas infantiles".


También reivindican servicios para sus mayores, que suponen un 7% de la población, como un centro de día y una residencia pública, "tanto para válidos como para los que no pueden valerse por sí mismos".


"Es incongruente que nuestros políticos hagan un canto a la vida cada vez que abren la boca y, luego, no pongan los medios para que los ciudadanos estemos bien atendidos, especialmente cuando venimos o nos vamos de este mundo", concluye Murillo.


Las calles más jóvenes se encuentran en los barrios periféricos de creación más reciente como Valdespartera, Rosales del Canal, Parque Goya o Miralbueno, donde el pico de la distribución poblacional está entre los 30 y 34 años. En su mayoría, parejas jóvenes con niños o proyecto de tenerlos, lo que supondrá un aumento exponencial de la cifra de menores en edad escolar en los próximos años.


Sus continuas reivindicaciones también apuestan por el aumento de plazas escolares públicas tanto en guardería como en colegios e institutos, además de instalaciones deportivas y parques infantiles.