Xenofobia

Sos Racismo alerta del aumento de casos de racismo en Zaragoza

El año pasado se atendieron en esa sede 521 consultas de las que 152 fueron casos "comprobados" de racismo.

La oenegé Sos Racismo ha alertado del aumento de casos de racismo y xenofobia en Zaragoza, donde en 2011 se abrieron expedientes por 152 denuncias frente a las 138 del año anterior.


Así lo ha puesto de manifiesto la coordinadora del área de denuncias de Sos Racismo, Katrina Belsué, en una rueda de prensa para presentar la memoria del año 2011 de su Oficina de Información y Denuncias de la capital aragonesa.


El año pasado se atendieron en esa sede 521 consultas de las que 152 fueron casos "comprobados" de racismo y xenofobia por los que se abrió un expediente.


Los casos van desde agresiones físicas hasta la prohibición de entrada a locales públicos, actuaciones de las fuerzas y cuerpos de seguridad o discriminaciones en el ámbito laboral.


Sos Racismo también detectó el pasado año un endurecimiento en la concesión de renovaciones de permisos y mayor dificultad a la hora de encontrar ofertas para conseguir tramitar permisos por arraigo y se llegó a conocer algún caso de venta de contratos.


Son situaciones que generan un aumento de la vulnerabilidad de personas inmigrantes o grupos minoritarios, a lo que también contribuye, ha advertido Belsué, cuando desde los poderes públicos se habla de estos colectivos en términos de inseguridad y empleo en lugar de convivencia, o cuando los medios de comunicación realizan reportajes alarmistas o nombran la nacionalidad en casos de delitos.


"La visión sólo de lo negativo no ayuda", ha dicho esta profesional, quien ha puesto como ejemplo situaciones que los afectados cuentan como anécdotas pero que podrían ser objeto de denuncias.


Así, ha citado el caso de una mujer inmigrante que en un consultorio sanitario se quejaba ante su hija de lo que les costaba que la atendieran en el médico y otra mujer le respondió que podía dar las gracias porque la atendieran o de otro extranjero que iba por la calle y un hombre se le acercó para decirle que lo que tenía que hacer era irse a su país.


Son actuaciones que, según Sos Racismo, debería saberse que no son impunes y que se pueden denunciar en organizaciones como la suya, al igual que los controles que realizan en la vía pública agentes de las fuerzas de seguridad y que suelen centrarse en personas claramente identificables como inmigrantes.


Aunque en la mayoría de las denuncias se llega a un acuerdo con el denunciado, algunas derivan en procesos judiciales, generalmente, ha reconocido Katrina Belsué, en aquellos casos en los que interviene la policía porque desde este cuerpo también se interpone denuncia por resistencia o desobediencia.


Otros casos que no se pueden solucionar desde Sos Racismo se derivan a otras organizaciones como Cáritas, sindicatos o al Servicio de Asistencia y Orientación Jurídica.


Además de atender consultas y demandas, durante 2011 Sos Racismo participó en varias mesas de trabajo junto con otras oenegé como la de la Prostitución en Aragón contra la trata de seres humanos con fines de explotación sexual; la de Prisiones para difundir información sobre cuestiones de extranjería a la población reclusa inmigrante; o la del Grupo de Extranjería sobre criterios de aplicación de la legislación en esta materia.


Asimismo, organizaron una sesión informativa sobre el Reglamento de Extranjería, un curso formativo sobre la visión de género en la inmigración, programas para el fomento de la convivencia intercultural en el ámbito educativo y de prevención del racismo en Utebo o charlas sobre Educación para la Ciudadanía, entre otras.