Arte

Las pinturas mudéjares más antiguas de Aragón, en Ateca

La restauración de la iglesia de Santa María ha dejado otros hallazgos como una clave oculta bajo la actual y unas ventanas gótico-mudéjares.

Imágenes de la restauración de la iglesia de Santa María de Ateca, antes y después
Descubren en Ateca las pinturas mudéjares más antiguas de Aragón
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La restauración de la iglesia de Santa María de Ateca ha sacado a la luz nuevos restos del arte mudéjar en Aragón. Entre otros, el conjunto de pinturas más antiguo que se conserva de esa época en la Comunidad. Estos restos datan de la primera mitad del S. XIV.


Antes de proceder a la restauración, se realizó un estudio para comprobar que no existieran capas intermedias. Se trata de un revestimiento polícromo que cubre tanto los muros con otros elementos decorativos.


Una vez comprobado, se pasó a trabajar sobre las pinturas de la cabecera, las bóvedas y los paramentos verticales. Son contemporáneas de la decoración de San Pedro de los Francos de Calatayud, pero como "conjunto de la época es el más antiguo conservado", indica Mercedez Núñez, una de las restauradoras.


El trabajo en esta parroquia ha consistido en el descubrimiento de la decoración mudéjar, la conservación del edificio, consolidación estructural, ya que habían aparecido una serie de grietas, y limpieza de la policromía de la decoración mudéjar.


Otras "sorpresas"

Las pinturas mudéjares no han sido las únicas obras que han salido a la luz durante la restauración. Bajo la clave actual se encontró otra más antigua de madera policromada con una Virgen sedente sosteniendo al niño, ambos bordeados por una esfera.


Esta orla está decorada con caracteres de caligrafía gótica decorada con figuras de dragones que la rodean. La decoración mural en bandas rojas y amarillas que rodea la clave se prolonga por esta tapando la mitad de los caracteres, que no han podido ser descifrados.


La clave anterior se ha guardado para exponerla posteriormente junto a otras piezas encontradas como parte de una celosía o un trozo de vidriera.


Otro descubrimiento ha sido la existencia de ventanas gótico-mudéjares de las ventanas ojivales originales. Parte de estas estaban cubiertas por ladrillo y mortero. Se modificaron entre los S. XVIII y XIX, aunque se conservan por completo detrás del retablo. Las arquivoltas imitan el despiece de ladrillos.


Abierta por San Blas

La iglesia ha estado cerrada durante los 6 meses que han durado los trabajos de restauración, por lo que las celebraciones se trasladaron a la iglesia de San Martín. Este viernes la Iglesia de Santa María volvió a recibir a los fieles para celebrar la festividad local de San Blas.


Este conjunto parroquial fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 1985. Se construyó inicialmente en el estilo mudéjar, pero posteriores reformas se añadieron características de otros estilos, como el gótico. Se trata de una única nave con un ábside poligonal de 7 lados. En la segunda mitad del s. XIII se construyó su torre mudéjar en un principio exenta, sin embargo tras las posteriores ampliaciones quedó adosada al templo.


La empresa Albarium S. L., especializada en restauraciones, se ha hecho cargo de la obra. El presupuesto destinado ha sido de 120.000 euros para esta actuación en la que han colaborado la Diputación de Zaragoza, la Diócesis de Tarazona y el Ayuntamiento de Ateca.


El proyecto está firmado por los arquitectos Begoña Genua, Flor Mata y Miguel Ángel Untoria. El trabajo ha sido realizado también por la restauradora Mercedes Núñez, Sonia Salazar, María José García, Eduardo Alonso, Covadonga Menéndez, Clara Bernuez, Juan Antonio Gracia, José Antonio Durán y María Rosa Ruiz.