La DGA concluye la retirada de cadáveres de los animales muertos por la crecida del Ebro

Lobón asegura que la rapidez de reacción del Gobierno ha evitado un problema sanitario.

Un cerdo muerto junto al río en Boquiñeni
La DGA concluye la retirada de cadáveres de los animales muertos por la crecida del Ebro
Guillermo Mestre

Más de 9.000 animales muertos en granjas e instalaciones ganaderas de la provincia de Zaragoza, a causa de las inundaciones provocadas por la última gran crecida del Ebro, han sido retirados en una operación que ha dado por concluida el Gobierno aragonés.


La empresa pública Sarga, que ha movilizado cientos de empleados, ha terminado la retirada de cadáveres, ha dicho el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Modesto Lobón, quien ha destacado que "el tema está prácticamente resuelto".


Lobón ha manifestado, en un comunicado, que la rápida reacción del Gobierno ha permitido que no exista un problema sanitario y ha recordado que "llevamos tiempo haciendo controles sanitarios".


En total, se han retirado unos 9.000 animales muertos (corderos, vacas, cerdos y animales domésticos como caballos) de explotaciones ganaderas de las localidades de Gallur, Boquiñeni, Remolinos, Nuez de Ebro, Villafranca de Ebro, Alfajarín y Alfocea.


Solo queda en la localidad de Remolinos, una de las más afectadas por la riada, un "problema residual", ya que hay granja que se ha convertido en una isla rodeada de agua, con 500 terneros, de los que 300 están muertos, ha explicado el consejero.


Los animales vivos han sido evacuados a una zona seca muertos se han apilado en una zona donde el domingo, se les pondrá una capa de cal viva y un cercado de arena para que sean estancos y cuando el agua descienda se les pueda sacar en camiones.


La Dirección General de Salud Pública ha desplegado un amplio operativo, en coordinación con la Dirección de Salud Animal y Protección Civil, integrado por veterinarios, farmacéuticos y un experto en patología animal que no han detectado ningún problema para la salud.


El operativo, según la administración aragonesa, se mantendrá mientras dure la emergencia para garantizar el correcto estado del agua en las zonas afectadas por las inundaciones.


El único pueblo que aún tiene problemas de suministro de agua es Boquiñeni, donde personal del Instituto Aragonés del Agua limpia la red de abastecimiento, que fue contaminada por hidrocarburos procedentes de un depósito existente en una empresa de la localidad.


La red vial todavía tiene problemas y siguen algunas carreteras comarcales cortadas como la VP5, en Novillas; la CP3, entre Pradilla y Boquiñeni; la A127, en Gallur; la A1107, en Pina de Ebro; la CV314, entre Movera y Pastriz; la autopista ARA A1; y el camino de Alfocea (con acceso sólo para todoterrenos).