Parte del tejado de la iglesia de Luna se hunde cuando iba a empezar su arreglo

El templo, del siglo XVIII, lleva cerrado al culto desde hace más de dos años por riesgo de derrumbe. Los trabajos de rehabilitación se habían paralizado por falta de ayudas.

Iglesia de Luna
Parte del tejado de la iglesia de Luna se hunde cuando iba a empezar su arreglo
Heraldo

Parte de la cubierta de la iglesia de Santiago y San Miguel de Luna se ha venido abajo. Unos setenta metros cuadrados de tejas y madera han caído sobre una de las bóvedas de este templo del siglo XVIII.


Los arquitectos dieron con este hallazgo el pasado miércoles, justo cuando se disponían a continuar con la obra de restauración del tejado, para la que a finales de 2014 se aprobó una ayuda de 160.000 euros. La iglesia lleva cerrada al culto dos años por riesgo de derrumbe y, aunque se hizo una primera fase de rehabilitación, después los trabajos quedaron paralizados por falta de ayudas.


"Decíamos que era grave y no nos hacían caso. Lo que fracasa es que lo que era una gotera, con la tardanza, acaba siendo un tejado entero", explica el alcalde, Santiago Púertolas (PAR). "Durante todo el 2014 no se hizo nada y, además, el convenio que íbamos a firmar en verano se retrasó a finales de año", añade.


Las termitas, la humedad y los excrementos de palomas provocaron importantes desperfectos en la iglesia que acabó con el derrumbe de parte del techo sobre la bóveda hace algo más de dos años.


La madera se pudrió y el agua comenzó a filtrarse afectando también al interior. Esto obligó a que, en febrero de 2013, el templo se cerrara al culto. Los informes técnicos de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) y del propio Ayuntamiento de Luna recomendaban el cierre de la iglesia por el mal estado de conservación en el que se encontraba, algo que también requirió la Diócesis de Jaca de la que depende.


Las misas se trasladaron entonces a la iglesia de Santiago, en el barrio de la Corona, la parte alta del pueblo.


"La realidad económica va por un lado y la gravedad del tema por otro. Si se hubiera actuado antes, se habría evitado que el edificio enfermara más y además ahora no costaría tanto -añade el aragonesista-. Arreglar el tejado es fundamental para salvar el templo".


La próxima semana, representantes del Ayuntamiento, de la DPZ, del obispado y los arquitectos se reunirán para ver cómo proceder tras los últimos acontecimientos. Primero hay que conocer la valoración y concretar las actuaciones, que luego habrá que sacar a licitación, por lo que pasará un mínimo de mes y medio, según detalla el alcalde, antes de que empiecen los trabajos de rehabilitación. Puértolas asegura que el templo no corre riesgo de derrumbe, pero sí el techo.


Esta iglesia es de estilo tardobarroco, fue construida entre 1734 y 1767. En su interior posee piezas, esculturas y pinturas de importante valor histórico.


Entre ellas, la web de turismo de la Diputación Provincial destaca la cruz procesional en plata sobredorada del siglo XV, dos pilas de agua bendita del siglo XVII, una imagen de San Sebastián de 1608 cobijada en el retablo de la Sagrada Familia, el órgano barroco del silo XVIII, dos puertas de madera labrada del siglo XVII situadas en el presbiterio o la rejería y sillería del coro.


La DPZ, el arzobispado y el Ayuntamiento firmaron el primer convenio a tres bandas -aportando el 60%, 20% y 20%, respectivamente- a finales de 2012. El primer presupuesto era de 94.000 euros y con esta cantidad se consolidaron las zonas más urgentes de la cubierta, eliminaron goteras y grietas del interior, así como la suciedad de las bóvedas por los excrementos de palomas.


Las obras culminaron en 2013 y después estuvieran paralizadas un año. No fue hasta diciembre de 2014 cuando se volvió a firmar otro convenio, por valor de 160.000 euros, con el que se iba a rehabilitar la mitad de la cubierta, trabajos que estaban a punto de empezar.


El alcalde de Luna insiste en que las obras no pueden parar hasta que termine el arreglo del tejado. Aunque hace hincapié en que luego deberán continuar con el interior, eso con menor urgencia.