La calle Altair, un peligro sin aceras

Caminar por muchas aceras de Valdefierro es una peligrosa aventura. Decenas de postes -de alumbrado, electricidad o telefonía- están plantados en mitad de la acera, impidiendo el paso de un carrito o silla de ruedas. En algunos sitios, ni siquiera cabe un peatón. Y el punto negro del barrio es la calle Altair, como denuncia un vecino, José Gracia.

El primer tramo de la calle Altair -cercano a la de Federico Ozanam- es una vía sin aceras. La de un lado está ocupada por una obra desde hace dos años. En la otra, hay tres postes en mitad de la acera que no dejan pasar ni a un peatón. Además, es una calle con mucho tráfico por la que pasan dos líneas de autobús urbano, la 24 y la 36.

"La gente se tiene que bajar a la calzada, es un peligro. Además, es una de las calles más transitadas del barrio, porque une la parte alta y la baja de Valdefierro. Y decenas de autobuses pasan al día por aquí. Los vecinos dan un rodeo para evitar pasar por este tramo, pero a algunos no les queda más remedio que ir andando por la calzada para acceder a su casa", denuncia José Gracia.

Denuncias en todo el barrio

"El problema se repite en varias calles del barrio. Lo hemos denunciado repetidas veces al Ayuntamiento, pero no aparece nadie para resolver este despropósito", añade este ciudadano. La asociación de vecinos Aldebarán se ha quejado en numerosas ocasiones. Calculan que en las aceras del barrio hay unos 300 postes, mayoritariamente del Ayuntamiento, de alumbrado público, pero también de compañías privadas de electricidad y telefonía.

"Antes, el Ayuntamiento tenía una partida presupuestaria para este tema y cada año retiraba cuatro o cinco postes. Los vecinos señalábamos los más urgentes. Pero en 2008 y 2009 han quitado esta partida, será por la Expo y la crisis. Es un asunto que preocupa mucho en el barrio", afirma José Gracia. Además, añade este vecino, algunos de estos postes ni siquiera están en uso, porque con la construcción de nuevos edificios se han acoplado lámparas en las fachadas.

Valdefierro, por su tipo de urbanismo, sufre este problema más que otros barrios de la ciudad. Hay muchas calles en cuesta y con aceras estrechas. El barrio surgió de la construcción de parcelas y con una mala planificación urbanística. Hasta 2007, el Ayuntamiento fue retirando cada año unos pocos postes, pero aún quedan muchos plantados en mitad de las aceras que dificultan el paso.

Los padres con carritos de bebé y las personas en silla de ruedas son los que más padecen esta situación. "Muchos disminuidos vinieron a vivir hace años, porque se podían construir aquí casas más accesibles. Sus viviendas están adaptadas, el problema es que las calles, no", señala José Gracia.

Desde el Ayuntamiento explican que se trata de "un problema económico". "Con el recorte presupuestario y la crisis, no queda dinero para esto. En el futuro, cuando la situación económica mejore, se continuará con la retirada de los postes. Ahora hay cosas más urgentes", señalan fuentes del Área de Infraestructuras.

La mayoría de los postes que molestan a los vecinos son del Ayuntamiento -de alumbrado público-, pero también de compañías eléctricas y telefonía. Cada uno debe retirar los suyos. El Consistorio tiene un convenio con Eléctricas para el soterramiento de las líneas en varios barrios, entre ellos Valdefierro. Pero el soterramiento va lento.