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La comparsa de gigantes y cabezudos busca tener mujeres por primera vez en su historia
El Ayuntamiento elegirá 35 nuevos porteadores con un concurso que primará la presencia femenina. Hay 57 funcionarios candidatos, entre ellos varias mujeres, aunque deberán ganar su plaza.
Entre los gigantes de la comparsa de Zaragoza hay paridad entre hombres y mujeres. Seis y seis. Bajo sus faldas, en cambio, no ocurre lo mismo. El sexo masculino es el hegemónico entre quienes dan vida a estos personajes, y así lo ha sido durante toda su larga historia, que se remonta a finales del siglo XVII. Eso ahora puede cambiar. El Ayuntamiento de Zaragoza ha abierto un concurso de méritos para seleccionar a 35 funcionarios que entren a formar parte oficialmente de la plantilla de porteadores de la comparsa de gigantes y cabezudos de Zaragoza. En las bases se especifica que, a igualdad de puntuación, se primará la presencia de mujeres.
La comparsa nunca ha estado cerrada a la presencia femenina. De hecho, cuentan los más veteranos que en alguna ocasión se ha intentado animar a alguna chica a unirse al grupo. Pero la abrumadora presencia masculina acabó echando para atrás a la candidata. Ahora, esta posibilidad está más cerca, aunque para ello las aspirantes deberán conseguir una plaza en el concurso de méritos que ha abierto el Ayuntamiento.
La última vez que el Consistorio hizo una prueba para incorporar nuevos miembros a la comparsa fue en 1995. De aquellos que entraron y ganaron su plaza solo quedan ocho. Durante este tiempo, para completar el equipo se ha ido captando voluntarios de manera informal entre el personal municipal. Ahora, el área de Cultura quiere regularizar esta situación con un concurso de méritos abierto a funcionarios de carrera, interinos y personal laboral.
Se han apuntado 57 trabajadores municipales, entre ellos varias mujeres, para optar a alguna de las 35 plazas ofertadas. Los candidatos que ya han participado en alguna ocasión en la comparsa tendrán una valoración especial, mientras que los aspirantes sin experiencia previa deberán hacer una prueba práctica de aptitud en la que se valorarán aspectos como el baile o la coreografía. Si hay candidatos que cumplen los requisitos y tienen la misma puntuación, se primará el acceso de mujeres «hasta completar el 50% de seleccionados», según reflejan las bases del concurso de méritos.
Domingo Carrillo Simón, uno de los veteranos de la comparsa, señala que la presencia femenina «sería muy buena», y aclara que «hay mujeres que son perfectamente capaces de llevar un cabezudo o un gigante». Estos últimos tienen un peso diferente entre sí. «Hay alguno que pesa 35 o 40 kilos, y llevarlos bien es más cuestión de habilidad que de fuerza». Además, añade, «los relevos se pueden hacer más cortos en caso de que alguien –sea hombre o mujer– lo necesite».
La vicealcaldesa y concejala de Cultura, Sara Fernández, señala que este concurso es «un paso más en la lucha por la igualdad entre hombres y mujeres». La edil de Ciudadanos apunta que el hecho de primar la presencia femenina es una manera de «defender el derecho a ocupar los mismos puestos» y llegar a sitios que hasta ahora no habían contado con mujeres. Y más, señala Fernández, «en un sitio tan significativo y especial para todos los zaragozanos como es la comparsa de gigantes y cabezudos». «Era una reivindicación», explica.
