Los bailes tradicionales se apuntan a las fiestas

¡A bailar! es la consigna de este espacio festivo, y a ello se entregaron los asistentes a la plaza de José María Forqué, donde se celebra la iniciativa. En ¡A bailar! se dan cita estas fiestas del Pilar ritmos que van desde el swing a la salsa, pasando por el country y los bailes tradicionales, que eran los que en la mañana de este martes sonaban en esta plaza del barrio de San Pablo de Zaragoza. Y como para bailar solo hace falta voluntad y mover los pies, la cosa estaba muy animada pese a lo temprano de la hora, las diez de la mañana, con la fresca y las pilas cargadas después de un buen café con churros.

Sobre el escenario, los Bufacalibos de Biella Nuei y Lqtspera desgranaban melodías aragonesas a ritmo de pasodoble o de jota para regocijo del respetable, en su mayoría perteneciente al proyecto ¡Bailamos! Bailes populares aragoneses en la escuela. Bajo la dirección de la monitora Olga León, incansable indicadora de molinetes, vueltas y revueltas, cambios de pareja y demás florituras bailongas, los esforzados participantes ponían en práctica muchos de los ritmos aprendidos durante el curso.

Por ahí hacían corros y cadenetas alumnos de Primaria del colegio Rigel, del barrio de Torrero; de la Asociación Utrillo y del colegio de educación especial San Martín de Porres, ambos vinculados a Atades, y de las clases de español para inmigrantes de la Fundación Federico Ozanam. Y al llamado de la música, que se oía con fuerza por los alrededores, fueron acercándose también quienes salían de las vaquillas, que parece que no habían tenido jarana suficiente y seguían con ganas de mover el esqueleto. Y es que estas fiestas del Pilar la consigna es pasarlo bien y dar rienda suelta a la alegría. Esa que se desbordaba este martes por la plaza de José María Forqué.