Joaquín, de Pimpinela: “Lucía y yo nos planteamos desde el principio una carrera de fondo”

Lucía y Joaquín, en el Luna Park de Buenos Aires, en marzo de este año. Volverán allí en diciembre.
Joaquín, de Pimpinela: “Lucía y yo nos planteamos desde el principio una carrera de fondo”
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¿Se cansan alguna vez Joaquín y Lucía de entrar en la cabina telefónica y vestirse de Pimpinela?

No, en absoluto, es algo que hacemos naturalmente después de tantos años en ello; la esencia del dúo es lo que da vida a las historias que contamos. Cuando empiezan los tres minutos y pico de cada canción olvidamos de que somos hermanos y entra el doble personaje; así se produce también la conexión con el público. Teatralizamos nuestro desdoblamiento y es algo entretenido para nosotros. En mi caso, ser autor de las canciones me permite entender aún más a los personajes.


Cuando un artista de larga trayectoria anuncia que viene con nuevo espectáculo, los seguidores acérrimos tiemblan.

No deben preocuparse con nosotros, porque el espectáculo va reforzado con seis músicos, bailarines, coros, pantalla gigante que apoya el relato... pero junto al nuevo material están nuestras canciones más populares. Nos gusta que el público salga contento, y entendemos que vienen a oír esos temas que les trajeron nuevamente a vernos. Siempre me acuerdo de la actitud de Paul McCartney, a quien admiro muchísimo: canta los temas de los Beatles y los hace igualitos, es una generosidad de parte del artista. Nosotros jugamos con un pedacito de ‘Olvídame y pega la vuelta’ en reggaetón, por una versión que hicieron de ella, pero en el ‘show’ también la cantamos entera tal y como es.


¿Cuál es el secreto para conservar así la energía creativa?

Soy de temperamento paciente, el miedo a la página en blanco está ahí, pero Lucía y yo nos planteamos desde el principio una carrera de fondo, no queríamos ser una moda pasajera. A la hora de componer sé que nunca saldrá a la primera, son horas con la guitarra... y de pronto sale alguito que me conmueve. Escribir solo para la gente es una tentación, sobre todo si antes ha funcionado... pero si creas con el corazón, la empatía con quien te escucha acaba surgiendo.


¿A qué músico español admira más?

A Manuel Alejandro. Me hubiera gustado ser un autor tan prolífico como él.


¿Y su conexión con Zaragoza?

Muchas visitas, público cálido... el fútbol también, se seguía mucho al equipo con Barbas, Valdano y los hermanos Milito luego. España acogió muy bien a los talentos argentinos. Solo faltó Sandro de América, hubiera encajado bien en un país tan musical.

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