Un total de
25 bares de Zaragoza han solicitado sacar a la calle sus barras durante las próximas
Fiestas del Pilar. Son cinco peticiones menos que las registradas el año pasado, la cifra más alta desde que
se permitiera en 2013 a los hosteleros aprovechar la afluencia de gente para vender consumiciones en la misma acera.
De nuevo, la mayoría se ubican en el
Centro y Casco Histórico de la capital aragonesa, donde mejores perspectivas de negocio encuentran los empresarios. Hay que tener en cuenta que los bares pagan por esta licencia especial entre
550 euros (si lo tramitan a través de las asociaciones del sector) y 700 euros (si lo hacen por la vía ordinaria) por instalar una
barra de dos metros. Por cada módulo adicional de otros dos metros el precio se fija en 300 y 400 euros respectivamente.
Para ello, deben cumplir una serie de requisitos. El principal, según marca el Consistorio, es la delimitación de esta propuesta a aquellas
aceras de más de cuatro metros de anchura, para no bloquear el paso de los viandantes.
Además, las consumiciones se ofrecerán en
vasos de plástico o similar; deberá informarse de los precios y de la prohibición de vender alcohol a menores; y el horario de las barras será el mismo que el del local asociado a ellas, entre otras obligaciones.
Precisamente el Ayuntamiento de la ciudad ha comunicado a los hosteleros la
ampliación del horario de cierre para el sector durante las próximas fiestas en dos horas adicionales, con el fin de dar cabida al incremento de clientes en estas fechas.