"La tarde de Calanda fue una gran inyección de moral"

Para Luis Antonio Gaspar (Zaragoza, 1978) hablar del Pilar es hablar de su feria. Aquí tomó la alternativa en 2001, con Joselito como padrino, cortando dos orejas y saliendo a hombros. Aquí repitió Puerta Grande un año después, y encadenó cuatro –2004 a 2007- arrancando, al menos, un apéndice. Aquí ha acumulado triunfos, derrotas y hasta cornadas, aunque ninguna tan grave como la que a punto estuvo de robarle la vida hace escaso mes y medio en Azpeitia. Aquí torea de nuevo Paulita, con la esperanza de cerrar sus heridas. 

-¿Antonio, hasta qué punto le ha afectado esa cornada?

-Al tratarse de una zona delicada, la recuperación ha sido muy lenta. Me llevó a perderme algunas corridas y eso siempre te enseña a esperar tu momento. A tener paciencia y controlar la ansiedad que tan malas pasadas nos juega a veces.

-Casi acaba con usted. ¿Supo de su gravedad desde el primer momento?

-Sí. Noté que me había clavado el pitón en la garganta, perdí el habla y hubo mucha hemorragia. Fue un momento tremendamente angustioso. Lo pasé muy mal yo mismo y los de mi alrededor.

-¿Cómo estaba siendo su temporada hasta entonces?

-Dura en cuanto a número de corridas, pero varias de ellas fueron en plazas importantes como la de Pamplona. Quedé satisfecho con mi toreo y con haber respondido a lo que el aficionado espera de mí.

-Supongo que reaparecer en una tarde como la del pasado lunes en Calanda fue una inyección de moral importante...

-Desde luego. Volver cortando dos orejas me vino muy bien. Me sentí a gusto, con toros que respondieron y me llevé buenas sensaciones para torear en Zaragoza. Algo muy importante.

-El año pasado, no hubo demasiada suerte con la de Victorino. Hoy, esperan los de Adolfo Martín. ¿Qué va de una ganadería a otra?

-Pues la verdad es que no hay mucha diferencia. Parece que te enfrentas al mismo toro. Cada ganadería busca distintas cosas, pero son muy similares. Adolfo Martín está mejor en estos momentos. Puede decirse que es la ganadería triunfadora de la temporada.

-Adolfo Martín está destacando en las corridas duras y Rafaelillo, compañero de cartel hoy, entre los encargados de lidiarlas.

-Ha atravesado años complicados y se ha sabido sobreponer gracias a una tremenda lucha. Merecía ser reconocido como lo que es: un gran torero.

-Y a Ricardo Torres, ¿cómo le ve?

-También es un torero que ha luchado mucho. Seguro que quiere aprovechar la oportunidad para relanzar su carrera.

-¿Qué le está pareciendo la Feria, hasta el momento?

-No he tenido oportunidad de asistir a los festejos porque estaba centrado en entrenar y preparar del mejor modo posible esta tarde, pero me dicen que está siendo entretenida, que han habido grandes faenas y el público está respondiendo.

-¿Y qué puede esperar ese público de Paulita?

-Entrega y predisposición, sobre todo. Como siempre que he toreado aquí, voy a poner toda la carne en el asador y espero que me salga un toro bueno con el que poder dar el 'campanazo' en mi tierra de una vez por todas. Siento mucho responsabilidad. Toreo en mi plaza y eso son palabras mayores.