Un total de 18 bares de Zaragoza van a ofrecer a sus clientes durante las Fiestas del Pilar una barra a pie de calle. Son los propietarios que se han animado a probar esta iniciativa, puesta en marcha por primera vez en la capital aragonesa, gracias a un acuerdo entre el Ayuntamiento y varias asociaciones de hosteleros.

Si se tiene en cuenta que en la ciudad existen hoy en día más de 2.500 bares con servicio de terraza, la cifra final de hosteleros que se han apuntado a instalar una barra se antoja escasa. Sin embargo, los impulsores de la idea señalan que se trata de un “experimento para ver si funciona”, en palabras del presidente de la Asociación de Cafés y Bares de Zaragoza, Pedro Giménez.

“Creemos que va a ser positivo para el negocio y para llevar la fiesta a la calle”, explica. Pero entiende a su vez que los tiempos que corren no propician muchas aventuras. “Para ser el primer año no está mal, la gente es remisa hoy en día a arriesgarse, pero servirá de punto de partida para próximos años”, señala.

El convenio firmado entre el Consistorio y los bares, cerrado a última hora y con ciertas prisas, permite a los empresarios del sector establecer una barra en la calle con determinados requisitos. Empezando por el canon, que asciende a unos 650 euros para los nueve días de fiestas.

Además, para no dificultar el paso de los peatones, el Ayuntamiento limita la instalación de las barras a aquellas aceras que cuenten con más de cuatro metros de anchura. De ahí que muchos no puedan optar a esta oportunidad.

No es el caso del bar Tehife, en la céntrica plaza de José Sinués de Zaragoza. Fernando es su responsable y ha dado el paso: “Es una buena idea, porque en otras ciudades existe desde hace años y funciona bien”, explica. Sin embargo, mantiene la prudencia de este primer intento. “Hay que confiar en que no llueva y ver si al final cuadran las cuentas”, comenta.

Análisis tras las Fiestas

Una vez concluidos los festejos del Pilar, los hosteleros y el propio Ayuntamiento harán un balance del experimento de este año. La idea es extenderlo en ediciones posteriores. “Queremos mejorar el convenio en los próximos años”, explica Giménez, a través, por ejemplo, de un mobiliario de barras unificado y de diseño acorde con las idiosincrasia de las Fiestas de la capital aragonesa.

A su vez, considera que esta iniciativa puede suponer un revulsivo para el empleo en el sector. “Esperamos un repunte en las contrataciones para atender las barras, aunque ahora queda tener suerte y que el tiempo acompañe para que la gente pueda disfrutar de las fiestas en el calle”, concluye.

Volver al suplemento de las Fiestas del Pilar 2013