PILAR 2009

Las 'joyicas' de la feria

Es tan general como tradicional. Lo explicamos: la visita a la Feria durante el Pilar, unos días en los que los pabellones acogen un 'totum revolutum' en exhibición, se ha convertido en un acto más de las fiestas, al que acuden sin falta curiosos y cotillicas de todas las edades, familias enteras amantes de los folletos y prospectos y mucha chavalería dispuesta a divertirse. La Feria abrió ayer las puertas de su 69 edición, en la que a contracorriente y desafiando a la crisis, ha aumentado en un 2% sus expositores respecto al del pasado año. Este 2009 serán 362 los puestos, dedicados a lo divino y lo humano, que puedan visitarse.

¿Por qué lo divino y lo humano? Porque al no haber un contenido concreto, en la Feria se juntan 'stands' dedicados al ocio, la gastronomía, el turismo, la ciencia e, incluso, a la labor de las Fuerzas Armadas. Este año también hay dos atractivas novedades que, eso sí, aún no arrancaron ayer sino que abrirán sus puertas el próximo día 15. Por un lado, el Chocofest, cuyo nombre deja poco a la imaginación y que podría subtitularse: "A nadie le amarga un dulce". Por otro, este 2009 también se celebrará el primer Salón Aragonés, que en estos días de exaltación folclórica y orgullo henchido seguro que hará las delicias del 'aborigen local'.

Un día señalado en la agenda de los organizadores es el próximo día 14, jornada dedicará a la tercera edad y en la que 'nuestros mayores' entrarán gratis. El miércoles, por tanto, y aunque entre semana la asistencia suele ir más floja, se formarán filas de pensionistas a las puertas de la feria y es previsible que los autobuses también rindan a pleno pulmón. La Feria ha hecho "un esfuerzo titánico" para facilitar el acceso de sus eventuales visitantes y se han dispuesto autobuses gratuitos desde seis puntos diferentes de la ciudad que suben y bajan durante todo el día. Los buses saldrán desde la avenida Picasso, el Paraninfo, la avenida Navarra, la avenida San José, y la plaza San Francisco.

En conclusión, allá en la A-2, a la altura del kilómetro 311, o mejor, justo en frente de Pla-Za, se despliega un 'maremagnum' de cacharretes, degustaciones, talleres e, incluso, ofertas de productos en 'stock'. Una buena y económica alternativa que permite al 'fiestero de pro' pasarse toda una jornada entretenido por apenas seis euros. Si se coge el autobús gratuito y los rigores del hambre se solventan con un bocata casero -hay que ver cómo se pone la plaza de la Feria a eso de las 14.30- pues se puede 'echar el día' de forma distraída y sin rascarse demasiado el bolsillo.