La Casa Consistorial de Zaragoza dejará de ser un espacio para la celebración de bodas civiles el próximo 15 de enero, cuando cederá el testigo al nuevo edificio de ceremonias situado junto al recinto de la Expo 2008, en el Parque del Agua. De momento, según informaron fuentes municipales, ya hay 60 reservas de parejas que han elegido las instalaciones para su enlace matrimonial.

La empresa adjudicataria del complejo y que también regenta el restaurante El Cachirulo está ultimando las obras para que todo esté en perfectas condiciones el próximo día 15. En total, han invertido unos 750.000 euros, destinados sobre todo a los cerramientos del edificio y a la adecuación del entorno.

Según explicó el gerente de El Cachirulo, Jesús Acín, el pabellón de ceremonias tiene un diseño versátil que permite dividir el espacio en cinco estancias. En función de las necesidades, las salas se pueden ampliar para atender celebraciones con más de 400 invitados. El edificio dispone de casi 800 metros cuadrados. Por otro lado, el edificio cuenta con otros 300 metros cuadrados de terraza. "Tal y como está quedando, será un lugar idílico", aseguró Acín.

Pérgolas cubiertas

Además de los cerramientos acristalados del edificio, la concesionaria ha instalado dos pérgolas exteriores de 120 metros de largo, que protegerán a los invitados de las inclemencias del tiempo. También hay un andador cubierto de unos 300 metros que conecta el aparcamiento con el edificio.

Según los cálculos del Ayuntamiento, se podrían celebrar unas 150 bodas al año. De este modo, se podrán reducir las largas esperas que hay en la actualidad para contraer matrimonio en la Casa Consistorial. Habrá celebraciones los viernes y los sábados. Entre abril y octubre, hay capacidad para seis enlaces diarios, tres al mediodía (12.00, 12.30 y 13.00) y tres por la tarde (19.00, 19.30 y 20.00). Entre noviembre y marzo, solo habrá bodas por la mañana. La tasa que hay que abonar por casarse en el pabellón asciende a 125 euros.

Por otro lado, El Cachirulo se encarga de la gestión del restaurante Espacio Ebro, situado junto al pabellón de celebraciones y que está pensado para los banquetes y eventos de todo tipo. El Cachirulo tiene la concesión del pabellón de ceremonias durante los próximos 30 años. Tendrá que abonar al Ayuntamiento un canon de 12.000 euros anuales, además de un porcentaje de los beneficios. La compañía espera rentabilizar la inversión realizada mediante el cobro de servicios adicionales para los clientes que utilicen el recinto.