Se llevan las cajas registradoras de dos bares de Zaragoza, pero se estrellan en la huida

La madrugada del domingo 30 de abril al lunes 1 de mayo dos jóvenes salieron a calle en Zaragoza en búsqueda de hacerse con algún botín.

Un coche de la Policía Nacional
Un coche de la Policía Nacional
POLICÍA NACIONAL

Dos jóvenes eligieron la pasada madrugada del domingo 30 de abril al lunes 1 de mayo para asaltar varios comercios de Zaragoza. Fueron dos bares situados en Valdespartera y Rosales del canal y consiguieron llevarse las cajas registradoras de ambos locales.

Su ‘éxito’ se vería frustrado por una persecución policial que acabó con el coche de huida estrellado contra unas biondas de hormigón, quedando el turismo en siniestro total.

El ‘Luna lunera’, situado en la calle Belle Époque de Valdespartera fue el primer objetivo. Llegaron hasta el lugar en coche y consiguieron acceder al establecimiento, donde, además de hacerse con la caja registradora, intentaron forzar una máquina tragaperras, según ha confirmado la Policía Nacional.

Tras esta primera incursión buscaron otro objetivo, para lo que se desplazaron más de tres kilómetros, hasta la calle calle J. Sebastián Bach, en Rosales del Canal. El objetivo fue el restaurante ‘La buena pinta’. El acceso a este local fue violento y utilizaron el mismo ‘modus operandi’, una técnica que no les funcionó en este caso porque despertaron a los vecinos de la zona, que dieron aviso al 091. Desde la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Jefatura Superior de Policía de Aragón enviaron varias patrullas a la zona, pero no dieron con los delincuentes.

La colaboración ciudadana fue la clave para dar con estas personas, ya que ofrecieron a los agentes la descripción del vehículo en el que habían huído, un Ford Focus. Con esta información las patrullas dieron con el objetivo y se inició una persecución por las calles del Distrito Sur de la capital aragonesa.

Todo acabó en la rotonda de la carretera de Madrid cuando, tras envestir a uno de los vehículos policiales, acabó chocando contra una de las biondas de hormigón, quedando el turismo en siniestro total.

Según informa la Policía Nacional, ambos ladrones huyeron de la carretera y consiguieron localizar a uno de ellos, Alberto A.R. de 18 años, en las inmediaciones del lugar.

El otro consiguió parar a un taxi, que le llevó hasta su casa a pesar de que el Cuerpo Nacional había dado aviso a los taxistas de lo que había ocurrido. Fue el conductor quien avisó a los agentes para informar que lo había trasladado hasta el barrio del Actur. Esta persona resulto ser el hijo de la dueña del vehículo siniestrado, Rahim M. R., de 20 años,

Los dos jóvenes quedaron detenidos a la espera de pasar a disposición judicial.

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