Los afectados por el trasvase del Jalón piden que el Gobierno aplique la Directiva del Agua igual que en Doñana
Unas 100 personas de la ribera entre Calatayud y Ricla se concentraron este pasado lunes frente al canal de traspaso de agua a Mularroya.
Cerca de cien personas, contando vecinos y representantes de distintas asociaciones de varios pueblos de la cuenca del Jalón entre Calatayud y Ricla, se concentraron este pasado lunes junto a las obras del túnel de trasvase del Jalón al río Grío para el llenado del embalse de Mularroya. Lo hicieron a la altura de Paracuellos de la Ribera, donde se encuentra un tramo a cielo abierto del canal y realizando un pequeño recorrido. Como demanda principal, reclamaron que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico aplique para este entorno la Directiva del Agua igual que en Doñana.
En este sentido, los presentes, la gran mayoría asociaciones locales de varios municipios, criticaron que el Gobierno de España, y en concreto la cartera que dirige Teresa Ribera, "utiliza un doble rasero" en lo que se refiere a la aplicación de la normativa comunitaria sobre el agua "dependiendo de sus intereses políticos", en referencia a la diferencia de criterio entre el humedal andaluz y la zona aragonesa. Ante esta situación, valoran que están estudiando "el modo de trasladar esta cuestión a instancias europeas".
De la misma forma, incidieron en que "mientras en Doñana se ha paralizado una iniciativa que todavía no ha pasado del papel, en el proyecto de Mularroya y el trasvase del Jalón se han dilapidado alrededor de 150 millones de euros públicos y se ha retorcido el derecho para aplastar los derechos de una minoría". Lo hacen, a su juicio, "en favor de los intereses políticos y económicos de grandes empresas y terratenientes". "Y todo ello pese a cuatro sentencias judiciales que han dado la razón al río y a los pueblos que viven en armonía con él desde hace siglos", insisten.
Recuerdan en un comunicado que el pantano está próximo a estar finalizado como "fruto de una irresponsable política de hechos consumados". "Pese a las sentencias judiciales, las obras han continuado su marcha, lo que supone un atropello contra los derechos de los habitantes del medio rural, contra el medio ambiente y contra toda lógica". Consideran que sí "existe margen para salvar el río Jalón, sobre el que está proyectado otro embalse", a la altura de Embid de la Ribera, en Calatayud, para derivar el agua que después se trasvasaría a Mularroya.
Valoran que una vez acabada la infraestructura y aguas abajo del punto de trasvase, el río vería "reducido su caudal de manera extraordinaria, lo que pone en peligro la agricultura tradicional y hasta la vida misma de los pueblos de una de las zonas que más sufre la despoblación en la provincia de Zaragoza". También apuntan que aguas arriba también habría afección ya que "el uso prioritario del agua pasará a ser el llenado del embalse de Mularroya y el embalse de La Tranquera pasará a tener un uso subsidiario, de acuerdo con lo que se indica en el proyecto".
Detrás de este acto y el movimiento de oposición están entidades como La Noguerilla (Embid de la Ribera), 87 razones y más (Comunidad de Calatayud), Sabinius Sabinianus (Sabiñán), Acapari (Paracuellos de la Ribera), La Sabina (Ricla), O Trinquete (Arándiga), la Plataforma Jalón Vivo, la Fundación Nueva Cultura del Agua y SEO/BirdLife.
Esta acción es la continuidad de una serie de reuniones en las que se ha valorado la apertura de nuevas vías judiciales para "denunciar el atropello de los derechos fundamentales de los vecinos del Jalón". "La Comisión Europea parece que podría ser el camino más rápido para este atropello jurídico y ambiental", valoran.
