La sastrería de Zaragoza que confecciona los uniformes de la AGM, también el de Felipe VI y quizás el de Leonor

La Fama se encargó de fabricar una parte del uniforme del rey y, previsiblemente, vestirá a la princesa de Asturias. 

Luis Arranz, sastre y propietario, junto a Cristina Cuber, de La Fama, en Zaragoza.
Luis Arranz, sastre y propietario junto a Cristina Cuber, de La Fama, en Zaragoza.
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Con metro, jabón, tijera y cartón. Sin ordenador. Y personalizado. Así diseñan y confeccionan a día de hoy los uniformes de los cadetes que ingresan cada año en la Academia General Militar de Zaragoza. La Fama, una sastrería centenaria de la capital aragonesa, se encarga de esta tarea (que sale a concurso cada año) desde hace más de tres décadas. 

Este negocio, situado en la calle Conde Aranda, celebra este año su 110 cumpleaños con la 'cuarta generación sentimental'. El abuelo de José Peña Gonzalvo abrió la sastrería en 1913, dejando su legado a su hijo y después a su nieto. Cuando se jubiló, los empleados (que llevaban "muchos" años en el negocio), Cristina Cuber y Luis Arranz, se convirtieron en los nuevos propietarios. 

"Comenzamos en los años 80 a hacer los uniformes de cuerpos comunes (médicos, músicos, veterinarios, jurídicos,...) de gala blancos y el pantalón de montar a caballo. De hecho, yo se lo hice en su día al rey Felipe VI. Fui a su camareta, al igual que sucedía con el resto de cadetes, y le tomé medida", subraya José Peña Gonzalvo. 

"Luego, a principio de los 90, ya empezamos a fabricar también el traje caqui y el gris y así lo siguen haciendo también ahora", desvela el sastre ya retirado. 

El proceso actual es similar al del pasado siglo, explica Arranz. "A principio de septiembre nos llama el teniente coronel que es Jefe de Vestuario y nos dice el día que tenemos que ir a tomar medidas. Previamente nos han pasado una lista con los trajes y las tallas que tenemos que confeccionar. No piden las medidas a los cadetes sino que nos pasan una estadística de las tallas más utilizadas cada año", argumenta. 

De izquierda a derecha, Luis Arranz, José Peña y Cristina Cuber, en el interior de La Fama.
De izquierda a derecha, Luis Arranz, José Peña y Cristina Cuber, en el interior de La Fama.
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En total, cada curso, suelen vestir a 500 cadetes, 250 de Tierra, más de 100 de cuerpos comunes y otros  100 guardias civiles (que pasan los dos primeros años en la AGM). "Nosotros vamos allí, tomamos medidas uno a uno (pecho, cintura y largo de pantalón), y le damos el traje de su talla que ya hemos llevado previamente a la Academia. Habitualmente, llegamos a vestir a 90 militares cada día. Siempre hay un porcentaje, alrededor de un 10%, que necesita que le confeccionemos el traje porque no se ajusta a los estándares habituales", subraya Arranz, el sastre de La Fama. 

"El mismo día que tomamos medidas, la mayoría de cadetes ya tiene su uniforme. Sin embargo, los que necesitan un traje con dimensiones especiales tienen que esperar a que lo confeccionemos. Para mitad de octubre, que es la jura de bandera, ya tienen todos sus trajes", explica. Hasta ese momento -los cadetes ingresan en torno al 20 de agosto- utilizan la vestimenta de maniobra. "Esos días les ponen a prueba en San Gregorio y es el momento en el que un pequeño porcentaje decide no continuar en la Academia", especifica Peña. 

Las tallas que solicitan desde el Ejército a esta sastrería zaragozana han ido cambiando en los últimos años. "Antes entraban siendo más mayores y ahora hay algunos que no tienen cumplidos ni los 18 años. La 48 y la 50 son las más habituales, pero ahora también nos piden bastante las 46. Incluso hemos llegado a hacer de la 42", sostiene. Existen cuatro tamaños de guerrera: corto, medio largo y extralargo. "Los pantalones van de cuatro en cuatro centímetros (100, 104, 108,..). Este año, hemos tenido que hacer también de 96", explican. 

En concreto, esta sastrería centenaria facilita a las nuevas incorporaciones dos de los cuatro trajes que utilizan durante sus cinco años de estudio civil y militar. El resto se encargan de gestionarlo directamente desde la Academia ya que pasan de unos a otros. "Nosotros nos centramos en el traje gris, que es con el que van a clase y en el caqui, que es el que utilizan habitualmente para estar en la Academia. Después tienen el de época (gala) que pasa de un cadete a otro cuando terminan los estudios y el de maniobras", subrayan Cuber. 

El Ejército se encarga de dispensar el tejido de la parte visible para los más de 1.000 trajes que confeccionan cada año en esta sastrería. "Son muchos metros de tela los que nos facilitan, pero del resto de material nos encargamos nosotros, es decir, de los forros interiores, los botones, las cremalleras,...", explican Cuber y Arranz. 

La incógnita de Leonor

Si La Fama se encarga de confeccionar los uniformes como viene siendo habitual desde hace décadas (a excepción de algún año), el próximo curso tendrán que vestir también a la princesa Leonor, que comenzará su formación militar en agosto en la Academia General Militar de Zaragoza. 

"Es una incógnita si pasará a que le tomemos medidas como una cadete más o si no será así", duda Arranz. En cuanto al uniforme de gala, prevén que tendrá uno nuevo. "Aunque habitualmente se recuperan, siempre hay alguno nuevo e imagino que a ella se lo darán", apostilla Peña.

Una sastrería reconocida a nivel nacional

La Fama es una sastrería reconocida a nivel nacional. "Ha venido gente de Ceuta, de Andalucía, Murcia, Valencia,... Hacemos también trajes de boda para militares y el boca a boca hace mucho", subraya Cuber. También se han encargado de confeccionar los trajes de los maceros del Ayuntamiento de Zaragoza, los de gala de la Policía Local. Además de confeccionar uniformes para diferentes cuerpos, especialmente del Ejército, también están especializados en equitación y cuentan en la tienda con todo tipo de material. 

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