El Ayuntamiento de Zaragoza ha ejecutado un 37% de las inversiones a un mes del cierre del ejercicio
El gobierno municipal achaca el porcentaje a los fondos europeos y a los concursos desiertos
Se dijo que 2022 sería el año en el que se batirían récords de inversión. Es más, la llegada de fondos europeos ha engordado los recursos para financiar nuevas obras. Pero a un mes del cierre del ejercicio, el Ayuntamiento de Zaragoza sigue lejos de cumplir el objetivo de atender la totalidad de los gastos previstos para ello. En concreto, el gobierno PP-Cs ha ejecutado el 37% de las inversiones, un total de 42,1 millones de euros.
Se trata de uno de los porcentajes más bajos de inversión de los últimos años, aunque en números absolutos la cuantía sea mayor. Esto se produce en un contexto en el que el volumen de presupuesto para obras es muy superior al de otros ejercicios. Además, según el gobierno, estos bajos porcentajes están vinculados a la entrada de una gran cantidad de dinero para inversiones de los fondos europeos, así como a los problemas a la hora de adjudicar algunas obras por el contexto de crisis y de inflación, aunque desde la oposición se achaca a «la mala gestión».
Según figura en la documentación contable, el presupuesto de 2022 se aprobó con 79 millones de euros en los dos capítulos inversores de la tabla de gastos. No obstante, se ha producido conforme ha avanzado el año un importante aumento por la entrada, fundamentalmente, de fondos europeos. En las cuentas definitivas figuran 113,7 millones, 34,6 más que en las iniciales. Esto, para el gobierno, distorsiona los porcentajes de inversión.
Por otro lado, fuentes municipales explicaron que las ayudas europeas «que van llegando no deben gastarse en 2022». «El Ayuntamiento cuenta con plazo de varios ejercicios para hacerlo, por lo que la ejecución no corresponde con el año de llegada de los fondos», declaró.
A esta situación se suman los contratos que no se han podido adjudicar por no haber suscitado interés: esto ha ocurrido con diversos proyectos, como con la adecuación del centro cívico Delicias, los pabellones de Garrapinillos y Monzalbarba, la rehabilitación de la cubierta de la Casa de Amparo o la adecuación de incendios del pabellón de Movera.
Según fuentes del Área de Hacienda, la ejecución del global del presupuesto superará el 92%. Respecto al capítulo 6, el más importante de los dos dedicados a inversiones, la previsión inicial era de 65,3 millones de euros, pero con los fondos europeos se ha quedado finalmente en 97 millones. «Los técnicos municipales estiman que podemos llegar a ejecutar hasta 57,65 millones de euros, lo que supondría una ejecución respecto al presupuesto inicial del 88%», explicaron.
Entre las mayores cuantías que quedan por invertir destaca el remanente de 4,6 millones de la plaza de Salamero, cuya reforma ha entrado en la recta final y se terminará a principios de 2023. El presupuesto tiene además aún sin gastar las partidas del centro de visitantes de la plaza del Pilar y la avenida de Cataluña, entre otras, que quedan para el próximo año.
