La nueva exposición de la Casa de la Mujer 'Cold piece of work' se adentra en los límites de la convivencia

Las obras, ubicadas en la sala Juana Francés, invitan al espectador a reflexionar sobre su situación emocional en su vida diaria  

El artista Víctor Solanas-Díaz y la concejal de Igualdad, María Antoñanzas.
El artista Víctor Solanas-Díaz y la concejal de Igualdad, María Antoñanzas.
Miguel G. García / Ayto.

La nueva exposición de la sala Juana Francés en Zaragoza se adentra en los límites de la convivencia en cualquier tipo de relación humana, e invita al espectador a reflexionar sobre su situación emocional en su vida diaria. Con un título en inglés, ya que ha sido concebida en este idioma por su autor, Víctor Solanas-Díaz (Tolosa, 1977) la muestra establece desde el comienzo una máxima que impregna todas las piezas, y es que "todos somos duros de pelar" y "una persona con la que a veces es difícil tratar", ha expresado su autor.

Esta es la traducción del título 'Cold piece of work', con la que el autor da nombre a un trabajo que se podrá ver en la sala de la Casa de la Mujer hasta el 20 de enero.

Esta iniciativa cultural ha sido presentada este martes por la concejal de Igualdad, María Antoñanzas, como parte de la programación organizada por el Ayuntamiento de Zaragoza de para sumarse al Día Internacional para la Eliminación de las Violencias contra la Mujer, que se conmemora el 25 de noviembre.

El autor se sirve de esta expresión anglosajona, 'Cold piece of work', para abordar un asunto fundamental para el ser humano, como es la convivencia entre personas, cualquiera que sea el tipo de relación afectiva que les mantiene unidas.

"Esta exposición no habla de una relación de un tipo o de otro, eso es irrelevante, habla de la convivencia, de la paciencia, el entendimiento, de cómo se establecen unos límites inevitables para cada relación, y de como, a partir de ahí, se transgrede o no se transgrede, hay días buenos, semanas malas o hay incluso épocas en los que uno ve que no puede seguir conviviendo", ha comentado.

De este modo, tras un "largo tiempo" observando diferentes situaciones sociales de convivencia, el artista visibiliza mediante la imagen y el concepto las fórmulas y estructuras que crean conductas y patrones de actuación en los "núcleos de convivencia" y que señalan "los ambientes que se experimentan cuando se vive en pareja", ha precisado.

"La trampa"

Las seis piezas que componen la muestra, y que han sido creadas específicamente para esta sala, conectan con esa idea, y buscan provocar en el espectador una reflexión sobre su situación emocional y sentimental, la gestión del tiempo doméstico, el espacio y privacidad, y sobre los límites en la convivencia con las otras personas que están en el mismo espacio reducido, que es el hogar.

La primera de ellas, situada en el centro de la sala, es un cepo forjado en hierro por el herrero Javier Rutia. Un cepo es una trampa, y con esta metáfora simbólica el autor quiere provocar la primera pregunta del recorrido que origina la buscada reflexión. ¿Qué es lo que me hace caer en la trampa? ¿Qué me atrapa a mí de la otra persona? ¿Por qué he caído en sus redes?.

"La trampa, en este caso, es por qué yo me he juntado con esta persona, por qué estoy vinculado emocionalmente a ella, qué tiene que me ha hecho caer en sus redes. Esa es la primera cuestión, el origen", ha expresado Solanas-Díaz.

A partir de ahí, se vertebra la exposición con otras cinco piezas, que con una lectura similar, profundizan en distintos aspectos que "tienen que ver con ese acceso a lo emocional". Habla de la necesidad de aprobación, de emocionar a los demás con nuestra imagen, algo que ha ganado todavía más fuerza con el auge de las redes sociales; de la fuerza de la erótica del poder y del éxito en las relaciones, del deterioro que provoca el tiempo en cualquier relación de convivencia o del respeto al espacio, la privacidad y el tiempo de la otra persona.

Lo hace con instalaciones hechas de materiales fácilmente reconocibles como una cuerda de tender, carruchas, arlita, malla de obra o una placa de inducción, entre otros. 

Más allá de las relaciones de pareja 

"No es una postura hacia lo clásico, nada más lejos, es simplemente que cada uno tenemos una situación, un posicionamiento individual y un desarrollo emocional, que es responsabilidad de cada uno, y que pasa inevitablemente por con quien has convivido de primera mano", ha recalcado. Hasta en el momento "más platónico y emocional" del comienzo de una relación, "hay momentos en el que has podido cometer un error y afectar al otro", ha opinado el artista.

La exposición, además de las relaciones afectivas de pareja, aborda otros aspectos y pone un ejemplo: "Hasta tu compañero de piso con el que compartes hogar ante la dificultad de pagar un alquiler tan alto puede sacarte de tus casillas con la forma en la que coloca los platos cuando recoge la cocina". Incluso, ha recordado, hay otras veces en las que se proyecta sobre el otro asuntos personales que no han sido resueltos emocionalmente de forma correcta.

Sobre todas estas cuestiones, que afectan tanto a la vida cotidiana, se reflexiona poco o nada, según Víctor Solanas-Díaz, algo que ha querido remediar en cierta forma con esta exposición.

"No se reflexiona nada sobre esto porque nos encanta vivir de ideas prestadas, vivimos de prestamos ideológicos, de estructuras ya fijadas, hablamos con frases hechas, no nos sentamos un rato a pensar al día". 

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión