Juzgan a un padre y a su hijo por acuchillar a su vecino en la calle de Azoque de Zaragoza
Fiscalía solicita sendas penas de cinco años de cárcel para ambos, que atacaron a la víctima con armas blancas e incluso con una barra de hierro.
El Juzgado de lo Penal número 6 sentó este jueves en el banquillo de los acusados a un padre y a su hijo por acuchillar a su vecino durante una pelea en un edificio de la calle de Azoque de Zaragoza. Por esta sangrienta refriega, la Fiscalía solicita sendas penas de cinco años de cárcel para ambos hombres, que atacaron a la víctima con armas blancas e incluso con una barra de hierro. Como ellos también resultaron heridos, aunque de menor gravedad, el Ministerio Público pide dos años de prisión para el acuchillado por un delito de lesiones.
Los hechos se produjeron sobre las once de la noche del 20 de junio de 2020 en el número 37 de la céntrica calle de Azoque. Los gritos de la virulenta trifulca pusieron en alerta a los vecinos del inmueble, que llamaron enseguida a la Policía. Cuando llegaron las primeras patrullas, se encontraron a los tres implicados en una vivienda de la primera planta. Todos estaban lesionados y las paredes estaban llenas de sangre.
Los tres fueron trasladados a un centro hospitalario, donde los médicos comprobaron que quien presentaba los cortes más graves era Bilal A., a quien habían herido en la espalda y en el muslo. El hombre, al que asiste la letrada Olga Oseira, también tenía varias heridas defensivas de arma blanca en la mano derecha, así como varios golpes y erosiones en las extremidades.
El padre y el hijo, Laureano L. H. y Pedro L. D., precisaron también de asistencia médica, pero sus lesiones no eran tan importantes. Se da la circunstancia de que ambos fueron condenados en 2015 a tres años de cárcel por otra agresión.
Cabezazo a un policía
La Fiscalía recordó este jueves la enorme violencia con la que se comportó Laureano L. H. durante su detención y posterior traslado a comisaría, causando daños en el coche patrulla valorados en 646 euros. No conforme con eso, amenazó gravemente a los agentes diciéndoles que los iba a apuñalar a ellos, a sus mujeres y a sus hijos. A uno de los funcionarios llegó a propinarle un fuerte cabezazo causándole una cervicalgia.
Padre e hijo continuaron montando jaleo y profiriendo amenazas en el calabozo del juzgado de guardia. "Ya os cogeremos fuera, os atropellaremos con el coche y os mataremos a vosotros y a vuestras familias. Sin el traje de policía no sois nadie", gritaron a los agentes que los custodiaban. Por todo ello, además de por sendos delitos de lesiones agravadas, el Ministerio Público les acusa también de atentado, daños y amenazas graves.
El acuchillado también arrastra antecedentes por un delito de robo con violencia y otro de lesiones leves, por lo que fue condenado en mayo de 2020.
