Aparatoso incendio en un edificio okupa de la calle Pignatelli

La Policía Nacional investiga las causas del incendio registrado este viernes en el número 67 de la calle de Ramón Pignatelli, un edificio de cinco plantas ocupado ilegalmente por completo por familias con niños y, según los vecinos, por traficantes de drogas. 

El fuego se declaró en torno a las 13.25 en un piso del primero y, aunque fue muy aparatoso y pronto se elevó en el aire una espesa columna de humo negro, afectó al balcón exterior y la vivienda superior, pero no causó daños personales.

Los ocupantes del edificio lo abandonaron antes de la llegada de los Bomberos, que sofocaron el fuego con rapidez, aunque algunas dotaciones permanecieron allí seis horas y media hasta que dieron por evacuado el humo y enfriada la zona. Aunque los residentes esperaban regresar al acabar las tareas de extinción, el inmueble fue acordonado y en los próximos días personal de Urbanismo inspeccionará los daños. Según su evaluación, el Ayuntamiento decidirá qué medidas adopta, informaron fuentes municipales.

La casa es una sociedad de inversión que tiene activos procedentes de bancos. Según estas fuentes, los técnicos de Urbanismo llevan desde principios de año intentando conseguir un acuerdo con la propiedad para adquirirlo con cargo al presupuesto del Plan Especial Zamoray-Pignatelli, con el que ya se han formalizado o comprometido la adquisición de hasta 13 propiedades de la zona.

Mientras, desde la asociación vecinal Calles Dignas, su presidente, Carlos Blanco, recordó que lo ocurrido era una "desgracia anunciada" de la que venían avisando "desde hace tres años".

Pilar, miembro del mismo colectivo y vecina del número 65, contiguo al que ardió, contó que hace poco tuvieron una filtración procedente del siniestrado, precisamente por su mal estado, y fue reparada por el Ayuntamiento. "Supuestamente iban a hacer algo más con las condiciones de salubridad del edificio y con las familias con niños que viven dentro, pero no han hecho nada", explicó. Dijo que la situación es "insostenible" y hay conflictos diarios.

El edificio fue rehabilitado en 2008 y fue destinado a personal de seguridad de la Expo, pero con el tiempo se deterioró y la propiedad lo abandonó. "Deben cerrarlo de una vez, reubicar a la gente donde tengan que hacerlo y cuidar de esos niños que no deberían estar allí", manifestó Pilar.