Paniza sube de nuevo el telón de su cine

La localidad zaragozana recupera el emblemático espacio tras un largo proceso de adquisición y reforma.

Inauguración del cine Mariano Laín de Paniza
Inauguración del cine Mariano Laín de Paniza
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Este sábado era día grande en Paniza. De celebración y comunión vecinal. Y no era para menos. La localidad zaragozana recuperaba su salón de cine después de un largo proceso de adquisición y reforma. Tras décadas en desuso, este espacio recupera su esplendor ante la mirada de los más mayores de la localidad, que vivieron su construcción en la década de los 50, y los más pequeños, que nunca habían pasado de su puerta junto al patio de la guardería municipal. "Tiene un trocito de cada uno de los vecinos", afirmaba esta semana el alcalde de Paniza, Manuel Cebrián, quien junto a los presidentes de las asociaciones del pueblo recordaba emocionado este sábado cómo ha sido siempre mucho más que un lugar donde ver películas. 

Este sábado abrió de nuevo sus puertas al público tras décadas en desuso.

Desde sus butacas, ahora cambiadas por las del desaparecido cine Elíseos de Zaragoza, se han presenciado conferencias, conciertos, asambleas de la bodega cooperativa Virgen del Águila, festivales infantiles o ensayos y actuaciones de grupos de teatro. Precisamente este sábado la inauguración del salón se completaba con dos pases de la obra ‘Entrañas de madre’, escrita por Mosen Domingo Agudo, antiguo párroco del municipio, e interpretada por varios vecinos. La iniciativa partió de la asociación de mujeres El Muro en 2019 como parte de la conmemoración de los 500 años del santuario de la Virgen del Águila, patrona de la localidad, pero la pandemia de coronavirus la ha ido retrasando hasta ahora.

Las butacas del cine Elíseos de Zaragoza, colocadas en el salón de Paniza
Las butacas del cine Elíseos de Zaragoza, colocadas en el salón de Paniza
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Imágenes antiguas de la construcción y el desarrollo del cine de Paniza
Imágenes antiguas de la construcción y el desarrollo del cine de Paniza
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Antes de subir el telón, todos los paniceros pudieron recorrer con calma las renovadas instalaciones y contemplar el antiguo proyector de películas, restaurado y colocado en la entrada del salón, junto a fotografías de la evolución del edificio y sus diferentes usos a lo largo de las últimas décadas. “Qué bonito ha quedado todo”, “qué cómodas son las butacas”, “¿se ve un poco más pequeño o es que yo me he hecho más mayor?”... Eran algunos de los comentarios que se escuchaban en la visita a la sala, donde todos terminaban contemplando en la pared del fondo los retratos de algunos de los paniceros más ilustres. 

Retratos pintados en el fondo de la sala
Retratos pintados en el fondo de la sala
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María Moliner, Ildefonso Manuel Gil, el doctor José Conde Andreu, Julio Palacios Martínez, Francisco Burillo, Ramón Gayán, mosén Domingo Agudo y Gregorio Ramón. Fuera, en la fachada, lucía ya el nombre del nuevo cine Mariano Laín, otro vecino muy involucrado con la divulgación cultural que “hizo a los paniceros y paniceras enamorarse del teatro", según destacó el alcalde.

Imágenes antiguas de la construcción y el desarrollo del cine de Paniza
Imágenes antiguas de la construcción y el desarrollo del cine de Paniza
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Un largo proceso

El cine de Paniza fue propiedad de la Iglesia hasta 2009, cuando el Ayuntamiento lo compró al Arzobispado de Zaragoza por 105.000 euros, casi la misma cantidad que ha costado ahora su última reforma desde 2020, en la que se han invertido 104.271 euros, de los que 84.518 euros los ha aportado Diputación de Zaragoza.

“Teníamos este salón de cine en la uci"

El anterior equipo de gobierno comenzó la reforma del espacio en 2010, transformando la guardería parroquial en la actual escuela infantil, se construyeron baños, se renovó la instalación eléctrica y se acondicionó la sala. Desde 2016, el actual equipo municipal instaló el aire acondicionado en la zona de guardería y la zona de recreo. Y a partir de 2020, se procedió a la rehabilitación total de estas dependencias, con la pintura exterior e interior, la adquisición de un equipo de sonido, se reforzó el escenario y se sustituyeron las antiguas butacas de madera por otras más confortables, las retiradas del antiguo Cine Elíseos de Zaragoza.

El alcalde Manuel Cebrián avanzó que a partir de otoño se estudiará la posibilidad de volver a proyectar películas y utilizó un símil médico para definir este pasado reciente y el futuro que está por llegar: “Teníamos este salón de cine en la uci. El antiguo alcalde Javier Gimeno buscó un pulmón y taponó algunas hemorragias y ahora le hemos conseguido un corazón y vuelve a latir. Solo hace falta una transfusión de sangre, que serán las personas que entren y salgan por su hall, su patio de butacas y su escenario para que siga vivo muchos años más".

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