sucesos 

El detenido por asesinar a su excuñado en Las Delicias fue juzgado hace un mes por amenazarlo

El presunto asesino sigue en Almería, donde pasará este martes  a disposición judicial para ser enviado más adelante a Zaragoza. 

Crimen en el barrio de Las Delicias
Crimen en el barrio de Las Delicias
Oliver Duch

Bobo Keita, de 42 años, presunto autor del asesinato de su excuñado, Alie S. fue juzgado hace solo un mes en la capital aragonesa por amenazar a este último. Durante la vista oral, el criminal declaró por videoconferencia desde la localidad barcelonesa en la que residía. A pesar de ello y de no estar físicamente cerca, Alie S., se mostró todo el tiempo temeroso del que había sido marido de su hermana. El sospechoso estaba acusado de un delito leve de amenazas que presuntamente había proferido contra la víctima a causa, con toda probabilidad, de la situación de su hermana, que también lo había denunciado en tres ocasiones por delitos de malos tratos.

Del carácter violento de este hombre da cuenta el hecho de que tenía una orden de alejamiento y prohibición de comunicación de su exmujer, a la que la Policía Nacional había clasificado como víctima de alto riesgo por el sistema de valoración Viogén.

Bobo Keita demostró su peligrosidad con creces cuando acuchilló hasta la muerte a Alie S., al que esperó armado con un cuchillo en las escaleras del edificio en el que vivía, en la calle Don Pedro de Luna de Las Delicias. El homicida lo había citado por teléfono en el portal porque quería hablar con él. Apenas llegaron a intercambiar palabras, pues al poco de bajar, Chima S., el hermano mayor de la víctima que se había quedado en el piso, oyó sus gritos de auxilio y cuando acudió a ayudarlo, ya estaba muerto.

El agresor se marchó andando hacia la calle de Sangenis, donde tiró la chilaba empapada de sangre debajo de una furgoneta, y luego se dirigió a un bar de doble entrada con salida al paseo de Calanda, se lavó los brazos y las manos, y se marchó tranquilamente dejando un rastro de sangre en el local. 

La investigación abierta por el Grupo de Homicidios se centró en una doble vía. Por un lado, en localizar cuanto antes al sospechoso y, por otro, en proteger a su exmujer y sus hijos, pues existían muchas posibilidades de que intentara localizarlos y hacerles daño. El matrimonio se había separado y la última denuncia de su pareja se había presentado hacía unos tres meses, según indicó el hermano del fallecido a este diario. Hasta entonces habían convivido en una localidad de la provincia de Barcelona, desde la que viajó a Zaragoza conduciendo su propio vehículo, que luego dejó abandonado en una calle cercana a Don Pedro de Luna.

Tras cometer el crimen, huyó de la capital aragonesa y logró llegar hasta Almería, donde fue detenido por la Policía cuando preparaba su huida al continente africano. El sospechoso será llevado hoy ante el juez de guardia de la ciudad andaluza, que le tomará declaración (si quiere hablar) y, con las pruebas acumuladas, decretará con toda seguridad su ingreso en prisión.

Las dificultades de un traslado tan largo han llevado a la Policía a esperar a que sea una conducción de la Guardia Civil –encargada del transporte de cárcel a cárcel con vehículos seguros y adaptados para tal fin– la que se encargue de ponerlo a disposición del juez de Zaragoza cuando este lo decida. 

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión