Fotos en 360 grados para marcar la diferencia

El Ayuntamiento, en colaboración con la Universidad, elabora guías virtuales que serán utilizadas por los Bomberos de Zaragoza en los incendios y en rescates

Las guías están formadas por fotografías capturadas con varias cámaras que se unen para crear ese efecto 360 grados.
Las guías están formadas por fotografías capturadas con varias cámaras que se unen para crear ese efecto 360 grados.
Universidad/Ayto.

El tiempo es clave. Y en una situación de emergencia puede llegar incluso a ser vital. Lo saben bien los miembros del Cuerpo de Bomberos de Zaragoza, con experiencia suficiente para comprobar que un puñado de minutos puede, a veces, marcar la diferencia en un incendio o en cualquier tipo de salvamento. Con el objetivo de agilizar sus intervenciones, la Universidad, en colaboración con el Ayuntamiento, ha elaborado unas guías virtuales de edificios o instalaciones singulares que permitirán conocer de antemano las características del lugar y que se prevén incluir en la próxima ordenanza municipal. De momento, se ha digitalizado un aerogenerador de La Cartuja, la sede de la CHE y el museo del Fuego, pero la intención es continuar con otros inmuebles.

La idea partió de una investigación previa de 2019 en la que, según cuenta César García-Hernández, profesor de la Escuela de Ingeniería y Arquitectura (EINA), se comprobó la utilidad de este tipo de herramientas para reducir el tiempo en el que se puede salvar a una persona. En concreto, se utilizan imágenes envolventes, en 360 grados, que permiten al usuario hacerse una idea prácticamente exacta de cómo es un entorno sin tener que estar allí.

«Están capturadas con varias cámaras para que cosiéndolas, uniéndolas, sean esféricas. Cuando las ves es como si te metieras dentro de una esfera en la que proyectas esa imagen –explica el investigador–. Si aparece una puerta hacemos que sea un hipervínculo, un enlace a otra parte del edificio».

Es el método que se siguió en los tres casos. En el areogenerador, por ejemplo, que fue el primero que se llevó a cabo, es posible ver el recorrido completo desde la base, en el exterior, hasta el interior de la góndola, en la parte superior. «De esta manera, si un trabajador de mantenimiento tiene un accidente los bomberos pueden ver toda la instalación antes de llegar», indica.

Para probarlo, se simuló un accidente en la parte más elevada del aerogenerador, que tiene una altura de unos 80 metros, y se midieron los tiempos desde la llamada al 112 hasta la evacuación. «Se comprobó que era útil, por lo que seguimos con un edificio de oficinas, la sede de la CHE porque tiene una cierta antigüedad y dificultades en cuanto a la seguridad, y un edificio público, que finalmente se decidió que fuera el Museo del Fuego», resume García-Hernández, que incide en que se comprobó su eficacia para facilitar rescates y «aumentar las probabilidades de éxito».

Además, apunta, estas guías no solo resultan útiles a la hora de atender una emergencia, cuando los bomberos pueden valerse de una tablet para observar el lugar afectado antes de llegar, sino que también pueden servir en los entrenamientos y en la formación de estos y otros trabajadores.

De momento, el Ayuntamiento prevé incluirlas en la futura ordenanza municipal contra incendios como parte de la «apuesta por la digitalización», según recalca el concejal delegado de Bomberos, Alfonso Mendoza, que se está llevando a cabo. «La idea, como ya se hizo con la unidad de drones, es usar la tecnología para dar un mejor servicio a los zaragozanos y minimizar el riesgo inherente del propio trabajo de los bomberos, que así pueden saber de antemano los planes de evacuación de un edificio o dónde se encuentran las escaleras y los elementos en los que pueden ayudarse», cuenta.

Por ello, la intención es seguir «poco a poco» elaborando más guías de edificios, sobre todo de aquellos singulares que por sus características requieran una preparación específica.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión