El puente de Gallur, hasta la bandera en el encierro más polémico
El evento estaba programado coincidiendo con el día grande de las fiestas de San Antonio. Los otros dos están previstos el día 29, festividad de San Pedro, y el 3 de julio, domingo, para celebrar el final de las fiestas.
Ni el cansancio de tres de días de fiestas ni el calor sofocante han sido obstáculo suficiente. Gallur entero y vecinos de toda la zona se han dado cita este lunes en el primer encierro desde el Puente de Hierro de los tres que se celebrarán durante este mes. El evento estaba programado coincidiendo con el día grande de las fiestas de San Antonio. Los otros dos están previstos el día 29, festividad de San Pedro, y el 3 de julio, domingo, para celebrar el final de las fiestas y que los galluranos que viven fuera tengan la oportunidad de disfrutar uno de los actos más tradicionales.
"Impensable sería un día de San Antonio en Gallur sin que el encierro comience en el puente que también se llama de San Antonio", ha apuntado el concejal de Cultura, Carlos Gracia, pendiente de que el festejo, que transcurre en poco más de un minuto, lo hiciera con rapidez, limpiamente y sin incidentes. Un buen número de trabajadores municipales con la colaboración de Protección Civil se han encargado de aplicar todas las medidas de seguridad que pudiera enturbiar una manifestación festiva que contaba con cientos de participantes.
Entre ellos José Luis Pejenaute de la población navarra de Cadreita, que jamás se pierde este encierro. "Es una gozada el ambiente que se forma, la emoción, es para vivirlo", señalaba. Desde la vecina Mallén había llegado con su cámara Diego Hernández a ver "algo diferente que no tenemos otros pueblos". Y dejando la polémica aparte, el gallurano Francisco José Calavia, apostaba por "disfrutar de este encierro que hace dos años que no se podía realizar por la pandemia. Sé que había que arreglar algo y que ya se ha hecho", apuntaba. Como también Margarita Urbieta destaca la parte tradicional y festiva. "Hay que continuar la tradición y acarrea una gran cantidad de gente ilusionada en correr el encierro y llegar a la plaza con las vacas".
Un encierro salvado 'in extremis'
La polémica encendió ánimos en los días anteriores al comienzo de las fiestas, ya que llegó a estar en entredicho la presencia de público y corredores en el encierro. La subdirección provincial de carreteras autorizó exclusivamente el paso de las reses bravas atendiendo a la mala situación en que se encuentran las aceras de la infraestructura sin mantenimiento desde 2018 , según se hacía constar en el documento que se envió al ayuntamiento en abril.
El repaso que la brigada de carreteras realizó 'in extremis' - los días 9 y 10 de junio-, y la aceptación de asumir por parte del ayuntamiento de la responsabilidad de los daños que pudieran ocasionarse tanto a personas como animales o en el propio puente durante la celebración de los festejos, consiguieron la luz verde para el acto.
El responsable de carreteras, Bizén Fuster, considera que el Puente de Hierro que forma parte de la travesía de la A-127 se encuentra en condiciones buenas para la función que desempeña, y señala que ha habido una mala interpretación que ha generado polémica. "La resolución prohibiendo la presencia de público se basa en el manifiesto peligro de que la gente pueda caer desde las arcadas. El puente se revisó y se hizo mantenimiento ordinario en 2017, 2018 y 2019 que habitualmente consiste en el repaso de las soldaduras de las chapas de las aceras. En el 2020 no se hizo por la pandemia de covid; y en febrero de este año, después de la avenida del Ebro, se realizaron obras de emergencia en la carretera y a la vez se sustituyeron todas las juntas de dilatación del puente y se ha hecho también el repaso de las soldaduras de las aceras. En el año 2020 estuvimos estudiando este puente y el del Canal con detalle y ratificamos que no hay daños estructurales".
Apunta también que la autorización de 2019 para el desarrollo del festejo taurino se hizo en los mismos términos que la de este año aunque no se atendió. "Después de hablar con el Ayuntamiento consideramos que, si se presentaba una alegación, como finalmente se hizo, y el Ayuntamiento asumía la responsabilidad, se autorizaría", concluye.
