Los trabajadores de la depuradora de La Cartuja se movilizan por el nuevo convenio

Tras el bus urbano, el tranvía, el mantenimiento de los parques, la zona azul y las instalaciones deportivas, otro servicio público de vital importancia para la capital aragonesa afronta un conflicto laboral entre los trabajadores y la contrata. Se trata, en este caso, de la depuradora de La Cartuja, donde la plantilla –de medio centenar de personas– denuncia la falta de voluntad negociadora de la concesionaria Utedeza (del grupo Veolia) para la firma de un nuevo convenio colectivo.

El actual caducó en 2020 y se ha prorrogado en dos ocasiones de acuerdo con el comité a cambio de negociar este año una mejora de las condiciones. Sin embargo, desde el sindicato OSTA aseguran que la empresa no da respuesta a la oferta de diálogo. Por ello, han planteado un calendario de protestas que comenzó este jueves con una concentración a las puertas de las instalaciones. El próximo día 26 se repetirá la convocatoria y el 2 de junio se trasladará a la plaza de España de Zaragoza. 

"Solicitamos a la empresa que, por lo menos, nos garanticen un incremento salarial, a cuenta de convenio 2021 y 2022, que nos permita amortiguar un IPC disparado o las subidas continuas de la luz, gas o los carburantes", señalaron desde el comité.

Los trabajadores, además, advierten de que el deterioro que sufre la depuradora de La Cartuja les afecta en su día a día. Las instalaciones, a punto de cumplir los 30 años de vida, ofrecen un "preocupante estado", lo que causa "numerosos incumplimientos" de la normativa medioambiental, según advierte en un reciente informe la Confederación Hidrográfica del Ebro.

Por todos estos motivos, la plantilla de la depuradora ha iniciado un proceso de movilizaciones que, aseguran, podrían desencadenar en una huelga en el servicio si no logran sus reivindicaciones.