Clases de felicidad en los jardines del Palacio de la Aljafería
Las actividades forman parte del Festival Mundial de la Felicidad que se han desarrollado en Zaragoza desde este viernes.
"La felicidad es un derecho y este domingo, 20 de marzo, celebramos su día internacional con sesiones de zumba, yoga y mindfulness en un marco incomparable como es el palacio de La Aljafería de Zaragoza, también palacio de la Alegría. Todo ello como colofón al Festival Mundial de la Felicidad que está siendo un éxito". Este es el balance que Luis Gallardo, presidente de la Fundación Mundial de la Felicidad, hace de congreso que se celebra en la capital aragonesa desde este viernes.
En un momento en el que ser feliz es más necesario que nunca y cuando los niveles de estrés, ansiedad y depresión han aumentado exponencialmente, contar con actos que reivindiquen el bienestar emocional es "es más necesario que nunca". "Estamos muy agradecidos por el recibimiento y la participación que hemos tenido durante todas las actividades programadas. Zaragoza es la ciudad ideal para celebrar unas jornadas como estas", apunta Gallardo, mientras ya piensa cómo celebrarlo al año que viene.
"Nuestro objetivo es expandir la felicidad a un mayor número de personas. Hay que pensar que no solo es posible ser feliz, sino que además podemos hacer felices a mucha gente si elegimos bien el camino", apunta Gallardo.
Esa sensación, la de felicidad, es precisamente la que transmitían las decenas de personas que al ritmo de la música disfrutaban de una jornada de baile en el foso del palacio gótico-mudéjar de Zaragoza. También quienes visitaban las sede de las Cortes se animaban a levantar los brazos y disfrutar de un "pequeño momento feliz". "De esto es precisamente de lo que se trata, de encontrar esa sensación maravillosa", comenta Luis Gallardo.
"Normalmente cuando a todo el mundo le va bien es obvio y sencillo lograr esa felicidad, pero en la actualidad estamos pasando momentos traumáticos colectivos por todo lo que ha ocurrido durante los dos últimos años. Ahora la guerra de Rusia y Ucrania, que también nos afecta por lo que ya venimos arrastrando. Este es precisamente el momento en el que es necesario contar con todos los recursos y técnicas que existen para encontrar nuestro equilibrio y paz interna", explica el presidente de la Fundación Mundial de la Felicidad.
Además del zumba, el yoga y la meditación, durante todo el fin de semana el festival ha contado con distintos foros. "Hemos apostado por un formato híbrido, de charlas y actos participativos, que han reunido a expertos en psicología, felicidad y salud quienes han abordado temáticas diversas: del bienestar en el trabajo a la salud mental, la educación positiva, las políticas públicas ligadas al bienestar social o la sostenibilidad medioambiental", comenta Luis Gallardo.
El Paraninfo de la Universidad de Zaragoza y el Patio de la Infanta de la Fundación Ibercaja han sido otras de las localizaciones de un festival que refuerza la posición de Zaragoza como ciudad de congresos, atrayendo a ponentes y participantes de diversas zonas de España y del mundo.
