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El jurado declara culpable de asesinato al padre que degolló a su hija en Zaragoza, que se enfrenta a 18 años de cárcel
La Fiscalía pedía la prisión permanente, pero al apreciarle la eximente incompleta de trastorno mental, ha rebajado el castigo. La defensa se conforma con los 18 años, pero exigirá que se cumplan en un centro penitenciario psiquiátrico.
No ha habido ninguna sorpresa. Tal y como estaba previsto, el jurado ha declarado culpable de un delito de asesinato al nigeriano Nosa Churchill Osarenmwida por acabar con la vida de su hija de forma intencionada cortándole el cuello y rematándola de una cuchillada en la parte superior del tórax. La Fiscalía pedía prisión permanente revisable por estos hechos, ocurridos sobre las once de la noche del 14 de septiembre de 2020 en un segundo piso del número 76 de la calle de Domingo Ram de Zaragoza. Sin embargo, el tribunal popular consideró probado que, cuando mató a la pequeña Iwinosa, de solo tres años, su padre tenía mermadas en un grado medio sus capacidades cognitivas y volitivas. Por ello, el Ministerio Público se vio obligado a aplicarle una eximente incompleta de trastorno mental y a reducir la petición de cárcel a 18 años.
En cuanto a la responsabilidad civil, tanto la acusación pública como la particular exigieron que el condenado indemnice con 100.000 euros a los herederos de la fallecida. Por su condición de insolvente, el homicida no podrá hacer frente a esta suma, pero la madre y el hermano de la niña podrán solicitar una compensación económica al Estado.
Como hiciera el pasado martes al presentar su escrito de calificación definitivo, la defensa, a cargo de la letrada Carmen Sánchez Herrero, se mostró conforme con la pena de 18 años de prisión y cinco de libertad vigilada. En cualquier caso, insistió en que solicitará que Nosa Churchill Osarenmwida cumpla el castigo en un centro penitenciario psiquiátrico.En concreto, en el de Foncalent (Alicante).
Durante su intervención en el juicio, los forenses descartaron que el padre acuchillara a la menos en pleno brote psicótico. «Sabía lo que hacía y pudo evitarlo», señalaron, dejando claro que no tenía todas sus facultades anuladas. Pero la defensa consiguió que el jurado considerara probado que, en mayo de 2019, su cliente fue diagnosticado de «otro tipo de esquizofrenia». Y es por eso que solicitará que ingrese en un centro donde puedan tratarle de su enfermedad mental.
En contra del indulto
A la hora de pronunciarse sobre una posible suspensión de la pena, los nueve miembros del jurado se opusieron de forme unánime. Lo mismo hicieron al ser preguntados sobre la posible tramitación de un indulto. En cuanto a la justificación de su veredicto, la portavoz explicó que se han basado, principalmente, en la confesión del acusado, el testimonio de su mujer, que fue testigo del asesinato, y los informes psiquiátricos y de autopsia de los forenses.
Al magistrado-presidente del Jurado, José Ruiz Ramo, le corresponde ahora dictar la sentencia y concretar la pena.
