ayuntamiento de zaragoza

Bronca en el Ayuntamiento de Zaragoza: PP-Cs retira competencias a la oposición, que estudia medidas legales

El gobierno se queda en exclusiva el control de las obras, tal y como contempla la Ley de Capitalidad, y la izquierda le acusa de "autoritarismo y falta de transparencia". 

Jorge Azcón y Víctor Serrano
Jorge Azcón y Víctor Serrano
Guillermo Mestre

El Ayuntamiento de Zaragoza aprobó este viernes la revocación de las competencias sobre las reformas de calles y otras obras ordinarias que hasta ahora ostentaba el Consejo de Gerencia de Urbanismo, con representación proporcional de todos los partidos. La coalición PP-Cs explicó que esta decisión se adopta para «corregir una anomalía», ya que la Ley de Capitalidad firmada entre el Consistorio y la DGA en 2017 establece que la aprobación de este tipo de proyectos esté en manos exclusivas del gobierno.

La decisión, en cambio, fue duramente criticada por los grupos de la izquierda, que incluso estudian medidas legales para revertirla. «Es un ejemplo más del autoritarismo y la falta de transparencia que ha demostrado y demuestra este gobierno y una forma de intentar coartar, una vez más, la labor de la oposición», lamentaron desde el PSOE.

En la misma línea, en ZEC consideran que «es un paso más en la involución democrática del gobierno PP-Cs y una muestra más de su incapacidad para dialogar y llegar a acuerdos con el resto de grupos». Por su parte, Podemos califica de «poco democrático» el comportamiento del alcalde, al que acusa de «ser incapaz de llegar a acuerdos y de tener miedo a las mayorías plenarias».

Fuentes del área de Urbanismo insistieron en que se trata de normalizar una situación anómala –que implantó el anterior gobierno de ZEC con el apoyo del PSOE– y que la tramitación de las obras ordinarias seguirá contando con «todas las garantías», como los periodos de información pública a los que se someten estos proyectos o los trámites de licitación en libre concurrencia.

Además, recuerdan que otras áreas no están sometidas al control del resto de partidos para llevar a cabo estas gestiones «ordinarias». Sin embargo, la oposición cree que este movimiento del gobierno municipal busca evitar el control de proyectos que financiados con partidas genéricas, y que, por tanto, no fueron objeto de aprobación por mayoría, como ocurrió, por ejemplo, con la supermanzana del campus de San Francisco que Vox logró paralizar.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión