Zaragoza es el banco de pruebas del futuro: ¿se podrán mandar hamburguesas o medicamentos con drones?

Hamburguesas que se envían por dron. Cajas de medicamentos que vuelan de forma rápida de un punto a otro de la ciudad. Piezas industriales que surcan los aires hasta una fábrica del extrarradio. El futuro ya (casi) está aquí, y se está testando en Zaragoza. La capital aragonesa se ha convertido en los últimos meses un banco de pruebas para el uso de drones, y decenas de empresas han utilizado -y lo van a seguir haciendo- su espacio aéreo para explotar el sinfín de aplicaciones que prometen estos aparatos.

Una de las pruebas más impactantes fue la del envío de una hamburguesa hace varias semanas. El Grupo Restalia -propietario de franquicias como The Good Burguer, La Sureña y 100 Montaditos- mandó un menú de un punto a otro con un dron para comprobar el tiempo que tardaba, la precisión, el mantenimiento de la temperatura de la comida, el estado en el que llegaba al destino… En la compañía ven el reparto por drones como “una realidad segura en un futuro próximo”.

“Con el reparto con drones se reducirían los tiempos de entrega y los niveles de contaminación, ya que descongestionamos las entregas en ciudades. Es un reto que merece la pena abordar. La experiencia adquirida con las pruebas de Zaragoza servirá para trazar los siguientes pasos”, señala José María Capitán, presidente ejecutivo de Restalia.

¿Quiere decir esto que se plantea a corto plazo el envío de comida a domicilios por dron? “En algunos sitios se está pensando para zonas de chalés, pero ahora mismo es algo lejano. Lo que estamos haciendo es probar, ensayar, para ver si en un futuro es algo viable y operativo”, señala Isabel Buatas, impulsora del Hera Dron Hub. Tras este nombre se esconde el primer espacio urbano europeo para la realización de pruebas y entrenamientos de drones, que ha colocado a Zaragoza en el mapa de estas nuevas tecnologías, y que está permitiendo a las empresas experimentar en forma real.

Por la capital aragonesa han pasado empresas de restauración, farmacéuticas, compañías de logística, de innovación tecnológica, de movilidad y, por supuesto, de drones. Se han hecho pruebas de vuelos simultáneos de varios aparatos para ensayar su coordinación, de vuelos que se pilotan desde otras ciudades, de envío de mercancías… “Se prueba la precisión, la influencia del viento -para esto Zaragoza es ideal-, el ruido que se genera, se comprueba la seguridad, se controlan los cambios de temperatura que puedan sufrir las mercancías, las mejores zonas para dejarlas...”, cuenta Buatas. 

Te puede interesar

Ehang, la empresa líder mundial en tecnología de vehículos aéreos autónomos, probará sus drones en Zaragoza

Su conclusión es que “la tecnología está preparada” para un uso generalizado de los drones en zonas urbanas, aunque aún quede trabajo por delante para avanzar en las pruebas, para garantizar la seguridad del tráfico y para cerrar regulación de la actividad, que se espera que esté aprobada el año que viene.

Esto no quiere decir que estos aparatos vayan a volar sin control, ni que puedan entrar a descargar su mercancía en cualquier punto. Se está estudiando qué características tendrían que tener esas zonas, que se podrían ubicar en centros comerciales, en azoteas, en puntos donde instalar ‘lockers’ o lugares de recepción… “Esto requiere de una nueva infraestructura física y aérea, y eso hay que probarlo en condiciones de seguridad”, apunta la representante del Hera Dron Hub.

Buatas augura que en un futuro próximo “los drones van a ser muy importantes”, que podrán hacer “un transporte rápido de medicamentos, de material biológico o de transplantes; eso está ya”. “Lo siguiente será el transporte entre empresas, que también es para ya”, avanza; y de ahí al reparto de mercancías a particulares, o incluso al transporte de personas, habrá un paso, augura. “Es un modelo de negocio sostenible, que ayudará a la descarbonización, y que resultará más rápido y económico que mandar una furgoneta, por ejemplo”, concluye.