Aguilón recuerda la riada que arrasó el pueblo hace un siglo
Un mural y un tótem, que se inaugurarán este próximo fin de semana, evocarán a los 17 vecinos que fallecieron en la catástrofe
La tarde del martes 20 de septiembre de 1921 se desató una tormenta que a los diez minutos provocó la gran crecida del barranco de Aguilón. Las aguas alcanzaron unos tres metros de altura y el cauce fue incapaz de contener ese torrente que se llevó por delante las casas y costó la vida de 17 vecinos. "La tremenda catástrofe" de Aguilón titulaba HERALDO la crónica publicada dos días después, en la que relataba cómo las familias habían quedado en la miseria más absoluta. Las pérdidas se estimaron en unas 800.000 pesetas de la época.
Un siglo después, el municipio quiere recordar "la que fue la mayor tragedia de Aragón provocada por el agua hasta la riada de Biescas", apunta el alcalde de esta localidad del Campo de Cariñena, David Dionís. "Todos los años se celebra una misa en memoria de las víctimas que paga una vecina que perdió a cuatro familiares, ahora desde el Ayuntamiento queremos también evocar lo ocurrido y que no caiga en el olvido", asegura el regidor.
Los actos comenzarán el sábado con un ‘street’ escape en las calles del pueblo, entre las 17.00 y 19.00, con el que se pretende que los aguiloneros más jóvenes hagan un viaje en el tiempo. Además, en la fachada del ayuntamiento se harán tres pases de un ‘videomapping’ (21.30, 21.50 y 22.10) que recreará este trágico episodio. Uno de los edificios arrasados por el agua fue la casa consistorial. Para esta ocasión, el Ayuntamiento también ha encargado el rodaje de un documental, de unos 20 minutos de duración, que recoge los testimonios de personas mayores de la población que, pese a no haber vivido aquella desgracia, quedaron marcados por lo que les contaron sus padres y abuelos y hoy lo recuerdan cada vez que hay un temporal. El audiovisual se está proyectando durante estos días.
El domingo, tras la misa en memoria de los fallecidos, se inaugurará el mural del centenario, pintado este verano, que recoge los motivos más representativos del municipio: pantano, águilas, molino y fósiles. También se descubrirá un tótem de piedra con una placa que recordará a los habitantes que perdieron la vida aquel trágico 20 de septiembre de 2021.
