La empresa y los trabajadores del tranvía rompen las negociaciones y la huelga sigue
El comité ha rechazado en el SAMA la última oferta de la empresa por la firma de un nuevo convenio colectivo. Ante la falta de avances, la huelga en el servicio se mantiene de lunes a viernes de 6.45 a 9.15 y de 13.00 a 15.30 durante todo el mes de septiembre, lo está causando complicaciones en la movilidad de la ciudad en la vuelta a la actividad tras el verano.
Lejos de acercar posturas, los trabajadores del tranvía y la empresa han acentuado sus discrepancias en la reunión que han mantenido este lunes en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA). El comité ha rechazado la última oferta de la concesionaria, tal y como acordó la plantilla en asamblea, y las negociaciones se han roto. De esta forma, la huelga se mantiene de lunes a viernes en hora punta.
“A la empresa le ha importado muy poco el sentir de la asamblea de trabajadores”, ha manifestado Carlos Lázaro, uno de los portavoces del comité, tras un encuentro que apenas ha durado diez minutos. “Siguen cerrados en banda”, ha lamentado.
En cambio, desde la sociedad Los Tranvías de Zaragoza, responsable del servicio, ha criticado la “nula voluntad de alcanzar un acuerdo sensato” por parte del comité, pese al “gran esfuerzo por las mejoras salariales, sociales y organizativas” que a juicio de la empresa se ha puesto encima de la mesa.
En concreto, la compañía ofrece un incremento salarial de hasta el 13% a lo largo de la duración del convenio, en virtud del IPC y de otros complementos y reducciones de horas de trabajo. En cambio, los conductores rechazan una propuesta que supondría “20 euros más al mes” cuando, recuerdan, la plantilla cobra un 30% menos que la del bus urbano.
Ante la falta de avances, la huelga en el servicio se mantiene de lunes a viernes de 6.45 a 9.15 y de 13.00 a 15.30 durante todo el mes de septiembre, lo está causando complicaciones en la movilidad de la ciudad en la vuelta a la actividad tras el verano. En cualquier caso, las afecciones están siendo limitadas gracias a los servicios mínimos decretados por el Ayuntamiento, del 60%, y a la baja demanda, que se mantiene un 30% por debajo de lo que era habitual antes de la pandemia.
Este martes, los conductores del tranvía se unirán a los del bus urbano, también en huelga los jueves y sábados por un nuevo convenio colectivo, para manifestarse por el paseo de la Independencia.
