tribunales en zaragoza
Multa de 1.440 € para un vecino del Actur por empujar a un hombre que murió horas después
El suceso se produjo en las Navidades de 2019 en la terraza de un bar. El acusado recriminó a la víctima que tirara un botellín a la cabeza de un discapacitado que eructó sonoramente.
Luis Javier R. H., de 31 años, no quería causar la muerte a Valentín M. G., de 53 años, cuando con un empujón le recriminó la actitud agresiva que acababa de tener con un joven discapacitado que eructó en la terraza del bar en la que estaban todos los protagonistas de esta triste historia. La juez así lo reconoce y, por tanto, condena al acusado por un delito leve de maltrato en concurso con otro de lesiones por imprudencia grave a ocho meses de multa, a razón de 6 euros diarios (1.400 euros en total).
La Fiscalía llegó a solicitar para él tres años de cárcel, petición que su abogado, José Cabrejas, calificó en el juicio de "barbaridad". El letrado recordó en su informe que su cliente tuvo la valentía de defender a una persona desfavorecida, pero el Ministerio Público proponía para él un duro castigo.
La juez da por probado que el 22 de diciembre de 2019 el acusado estaba con su familia (su mujer, sus dos hijos pequeños y su cuñado) en la terraza de un bar de la calle Alberto Casañal cuando un joven que tiene una discapacidad psíquica eructó de forma sonora, acto que Valentín M. G., que se encontraba en otra mesa acompañado de dos mujeres, le recriminó de forma violenta lanzándole un botellín a la cabeza, aunque no le alcanzó por poco. Dos clientes, además de Luis Javier R. H., le reprocharon su acción e incluso tuvieron que calmarlo. Pero Valentín M. G. se encaró con este último, que terminó dándole un empujón que le hizo caer al suelo y golpearse la cabeza.
El hombre, que había consumido alcohol, quedó unos instantes inconsciente y los presentes avisaron al 061. No obstante, cuando llegaron se negó a ser atendido. Después, siguió en el bar hasta las 23.00. Luego se fue a su casa y, por la mañana, su compañero de piso lo encontró muerto en su cama. La causa de la muerte fue un fractura del hueso temporal, que tenía muy adelgazado, que le causó una hemorragia de lenta evolución. Los forenses concluyeron que, de haber sido atendido médicamente, con muy alta probabilidad habría sobrevivido.
La juez no le impone ninguna responsabilidad civil en favor del hijo de la víctima, con la que no tenía relación.
