Zaragoza
La reforma de la calle San Miguel prolongará otros 200 metros la cota cero
El Ayuntamiento acometerá la obra el próximo año por un millón de euros y reordenará el tráfico de la zona.
La plataforma única de prioridad peatonal de la calle de San Miguel se prolongará otros 200 metros, entre Jerónimo Blancas y Comandante Repollés, con la reforma que ha diseñado el Ayuntamiento de Zaragoza. Las obras comenzarán en el primer trimestre de 2022, se prolongarán durante un año y cuentan con un presupuesto de algo más de un millón de euros.
Son las líneas básicas de una intervención que también prevé renovar las redes de saneamiento, introducir mobiliario urbano y reordenar el tráfico rodado de las calles adyacentes para priorizar la movilidad peatonal, según ha detallado este jueves la concejal de Infraestructuras, Patricia Cavero. “Actualmente el pavimento está muy deteriorado, no tiene bancos ni vegetación, la reforma es una demanda histórica de vecinos y comerciantes”, ha señalado.
La actuación forma parte de la denominada operación calles, con la que el gobierno PP-Cs prevé remozar siete vías de la capital aragonesa con una inversión de 11,4 millones a través de la sociedad municipal Ecociudad.
En este caso, la reforma prevé extender la plataforma única con un pavimento “cuyo diseño recuerda la geometría del mudéjar”, ha explicado Inma Subiri, responsable del proyecto. Además, con el objetivo de priorizar la movilidad peatonal, se restringirá el tráfico y se modificarán los sentidos de circulación de varias calles adyacentes.
En concreto, tan solo se permitirá el paso de vehículos entre Hermanos Ibarra y Sancho Gil, así como el acceso a los garajes entre esta última y Santa Catalina. Según explican desde el Consistorio, se elevará la calzada en las calles perpendiculares, lo que obligará a reducir la velocidad de la circulación para reforzar la seguridad.
Los técnicos de Movilidad han establecido además que se invierta el sentido de circulación actual de Sancho Gil, que tras la reforma dará acceso a la plaza de los Sitios, y de Arquitecto Magdalena y Santa Catalina, que conectarán con el Coso.
Renovación de servicios
Los trabajos también incluirán la renovación de la red de agua y saneamiento de la calle, así como del alumbrado público, que contará con tecnología led, eliminará las farolas de las fachadas y soterrará su cableado.
En este sentido, los responsables del proyecto han reconocido las dificultades con conlleva la obra, ya que las tuberías se encuentran a más de cinco metros de profundidad y San Miguel no cuenta con una gran anchura para maniobrar. “Serán unos trabajos complicados, pero se harán por fases y con buena coordinación”, ha señalado Subiri.
Estas limitaciones de espacio impedirán plantar arbolado, pero se instalarán cinco conjuntos de bancos con estructuras para arbustos a lo largo de la calle. “Recuperamos espacio para el ciudadano y lo hacemos más atractivo”, ha defendido Cavero.
