Zaragoza repartirá una guía de buenas prácticas ante la covid entre comerciantes y hosteleros

Más del 90% de los contagios de coronavirus se producen por aerosoles. Y bajo esta tesis han trabajado estos meses en el Colegio de Ingeniería Industrial de Aragón y La Rioja para, de la mano con el Ayuntamiento de Zaragoza, elaborar un manual de buenas prácticas con las medidas que se deberían implementar en comercios, establecimientos hosteleros y otro tipo de locales abiertos al público. La concejal de Economia, Carmen Herrarte, ha presentado este jueves el documento, que se repartirá por los distintos negocios de la ciudad y que, entre otras recomendaciones, insta a colocar medidores de CO2 y ventilar con frecuencia.

La edil ha explicado que se trata de una guía "con un enfoque práctico y no académico" y ha resaltado la "potente" labor de divulgación que se quiere llevar a cabo, con la distribución también a partir de este viernes de resúmenes y folletos explicativos entre más de medio centenar de asociaciones del sector empresarial. "Esperamos estar a la altura de todos estos científicos a la hora de dar a conocer su trabajo", ha dicho. Igualmente, Herrarte ha deseado que esta iniciativa suponga "un cambio de paradigma" para que las autoridades sanitarias comiencen a regular considerando la calidad del aire, ya que, ha recalcado, el criterio de aforos de forma aislada no garantiza que se eviten los contagios.

Útil y de fácil aplicación

Para empezar, la denominada Guía de Referencia Covid ahonda en cómo se producen los contagios. Según el estudio, en interiores mal ventilados hay de 20 a 100 veces más de riesgo que en el exterior. Y, desde ahí, parten las recomendaciones. "Nosotros tenemos que hacer tres cosas, medir, ventilar y filtrar, este es el mensaje que debe llegar a la ciudadanía", ha resumido durante la presentación del informe el decano del Colegio de Ingenieros Industriales, Salvador Galve, que ha destacado que se trata de un documento "útil, de muy fácil aplicación y que todo el mundo va a entender".

Además de los medidores y de la constante ventilación, marca un valor límite de CO2, por general, de 700 partículas por millón. Por encima de esa cifra la calidad del aire no sería óptima. También recomienda analizar las características del local para determinar cuáles son sus necesidades en cuanto a la ventilación mecánica o la posibilidad de usar filtros HEPA. Sin olvidar, como ha resaltado el autor Carlos López, las mascarillas y la distancia. "Nos están ayudando muchísimo", ha enfatizado.