Los conductores del bus inician este martes su tercera huelga del año con paros parciales a mediodía
El comité y Avanza se reúnen a las 8.00 para tratar de desbloquear el conflicto.
Por tercera vez en lo que va de año, los conductores del bus urbano de Zaragoza -así como el resto de trabajadores del servicio- volverán este martes a la huelga. Pero antes de que comience los paros de esta nueva ronda, tendrán una última oportunidad para desbloquear el conflicto con la concesionaria Avanza en una reunión ante el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA). El encuentro empezará a las 8.00 y, en función de los resultados, está previsto que, tal y como votó la plantilla en el referéndum del jueves, tres horas después se inicie la huelga.
Los paros parciales se harán todos los martes y jueves hasta el 1 de julio. En esta ocasión, el comité ha escogido la franja central del día, entre las 12.30 y las 16.30, en lugar de optar por dos paros de dos horas por la mañana y por la tarde como en las anteriores huelgas. De momento, ninguna ha tenido una gran incidencia por los altos servicios mínimos y por su corta duración y, si bien han hecho aumentar ligeramente los tiempos de espera, los usuarios apenas han percibido cambios.
El conflicto cumple ya un año y medio de duración, desde que en diciembre de 2019 caducó el último convenio colectivo y, pese a las decenas de reuniones que se han celebrado hasta la fecha, todavía parece estar lejos de acabar. Ambas partes se mantienen enfrentadas y se acusan mutuamente de negarse a negociar. De hecho, tras el último encuentro Avanza criticó la "nula voluntad de acercar posturas" del comité, mientras que estos culparon a la empresa de tener una actitud "inmovilista" y rechazar sus propuestas.
Si la reunión de este martes concluye de la misma forma, comenzará la huelga. El Ayuntamiento de Zaragoza fijó este lunes unos servicios mínimos de entre el 46,6% y el 60,1%, similares a los de las ocasiones anteriores. Los porcentajes, según explicaron fuentes municipales, variarán en función del tramo horario y de si se trata de jornadas festivas en colegios e institutos. Serán menores una vez comience el periodo vacacional, a partir del 24 de junio.
Menos horas y más salario
Los trabajadores quieren que el nuevo convenio reduzca la jornada laboral a 35 horas semanales y sirva para crear empleo. Además, piden que incluya cláusulas que garanticen la igualdad real y acusan a la compañía, según los representantes sindicales, de «querer quitarles derechos» que ya tenían adquiridos.
También exigen, como ha explicado en varias ocasiones el presidente del comité, Javier Anadón, que se "eviten las discriminaciones en turnos y descansos" y se establezcan unas frecuencias "que garanticen la calidad del servicio", así como una subida salarial "en línea con los beneficios" de la empresa.
