Zaragoza atendió durante el año covid un 14% más de casos de adicciones cada mes

Los problemas de adicciones no dejaron de crecer durante el año de la covid. El Centro de Atención y Prevención de las Adicciones (CMAPA) de Zaragoza atendió en 2020, en los nueve meses que se pudo trabajar de forma presencial, a 950 personas, de las que 545 utilizaron el servicio por primera vez. Supone un volumen de demanda de 105 casos al mes, un 14% más de los que se trataron durante el ejercicio anterior. La dependencia del alcohol siguió siendo, con un 30%, el principal motivo de las consultas, pero todas las tipologías se incrementaron y especialmente las relacionadas con el abuso de pantallas y el juego 'online', que en cinco años han experimentado un acusado aumento del 33%. Por eso, el Ayuntamiento acaba de iniciar este miércoles el proceso para actualizar sus políticas municipales en este área y poner el foco en la prevención de afecciones como la ludopatía y la adicción a la tecnología.

El concejal de Acción Social, Ángel Lorén, ha desgranado estos datos durante la presentación de la primera de las jornadas de trabajo impulsadas para desarrollar un nuevo Plan de Adicciones, que actualizará las medidas de atención de los consumos de riesgo de acuerdo a las tendencias observadas en los últimos años y marcará las prioridades a seguir desde el gobierno municipal. "El único documento de este tipo es de 2007, está desfasado y requiere una adaptación profunda", ha explicado el edil, que ha hecho hincapié en la necesidad de "apoyar especialmente a los jóvenes", el sector más vulnerable ante los nuevos problemas de adicciones. A la sesión, que se repetirá durante las próximas semanas, han acudido profesionales, expertos, instituciones y diferentes entidades sociales que trabajan en este ámbito.

Según ha contado, el objetivo es priorizar las líneas de intervención relacionadas con el juego 'online' y las apuestas deportivas, dos adicciones al alza que ya están causando importantes consecuencias entre la población. Y, para ello, el presupuesto municipal se ha dotado con una partida específica de 40.000 euros. Además, se quiere potenciar la metodología preventiva en torno al uso compulsivo de la tecnología y desarrollar un programa que trabaje directamente con adolescentes. También, ha mencionado Lorén, se creará un observatorio municipal de las adicciones para conocer y actualizar con precisión los datos que competen a la capital aragonesa. "Será un plan transversal y tutelado por el servicio de Juventud", ha añadido el responsable del área.

Los datos que, a la espera de conocer estudios más amplios, deja la pandemia, ya son, en palabras de edil, "preocupantes". Se ha observado una tendencia ascendente en el consumo de alcohol, la adicción más frecuente. El CMPA recibió una media mensual de 32 casos por esta cuestión frente a los 26 de 2019. Las atenciones por cannabis fueron el 20% del total y también crecieron de los 19 casos al mes a los 22. Y, muy de cerca, se sitúan las denominadas adicciones comportamentales, con 21 atenciones mensuales. Dos más que en 2019 y un 33% más que hace cinco años. Aquí, según ha explicado también la directora del centro, Irene Belloc, se ha notado especialmente el aumento de casos de adolescentes y jóvenes cuyas familias solicitan ayuda debido a problemas con el abuso compulsivo de pantallas (móviles, redes sociales o videojuegos) y las apuestas por internet, que provocan pérdida de autocontrol y cambios en la conducta.