gastronomía
La chocotorta, 'el mejor postre del mundo', en Zaragoza
Alma Criolla ofrece en versión tapa la popular tarta argentina que hace unos meses consiguió este título otorgado por la guía de viajes 'Taste Atlas'.
Entre las innumerables listas y ránquines de productos y recetas más destacados, la chocotorta argentina se erigió hace unos meses como 'el mejor postre del mundo'. El título se lo otorgó la guía de viaje experiencial de comida tradicional, 'Taste Atlas', a partir de las opiniones de críticos gastronómicos y artículos de investigación sobre ingredientes y platos populares. El reconocimiento lo consiguió imponiéndose a recetas como el helado de pistacho italiano, la tarta alemana de manzana, los waffles belgas y el zserbó húngaro.
Aprovechando esta noticia, las dueñas de Alma Criolla (c/ Mayor, 53, Zaragoza), Adriana Moreira y Celina Willimburgh, se animaron a incluir la chocotorta en su carta. Y eso que, según comentan, “nunca la encontrarás en un restaurante argentino; se hace en las casas para fiestas y cumpleaños de los niños o para tomar en la sobremesa, junto a un mate o un café”.
Adriana y Celina lo describen como “un postre que se elabora sin hornear y está inspirado en el popular tiramisú italiano, solo que lleva galletas de chocolate, dulce de leche y queso crema o de untar”. Ellas mismas reconocen que es “para muy lamineros, aunque el queso rebaja un poco el dulzor, pero es bastante contundente”.
En Argentina, las dos socias de Alma Criolla no tenían problemas para utilizar chocolinas, las galletas de chocolate con un punto amargo que se ponen en la base. “En España hemos encontrado unas parecidas, pero son redondas, cuando las de nuestro país son cuadradas”, explican. Lo único que han tenido que hacer ha sido adaptar el molde.
En cuanto al dulce de leche y la crema de queso, “también se pueden encontrar en Zaragoza”. Y lo más importante de todo, el test de calidad lo han realizado varios compatriotas suyos, “y lo hemos pasado con buena nota”, confirman sonrientes.
En la receta original, asegura Celina, “las galletas se mojan en Oporto, pero nosotras lo hacemos en leche, aunque también ofrecemos una versión con galletas sin remojar”. Encima de esta base se ponen la crema de queso y el dulce de leche mezclados y bien batidos. “Lo mínimo son cuatro capas que se intercalan con los dos productos, mientras que la parte superior suele decorarse con virutas de chocolate”, prosigue.
Su compañera Adriana explica que la chocotorta “se elaboró por primera vez hace unos 40 años; la creó una persona que trabajaba en una agencia de publicidad y que llevaba las cuentas de algunos de estos productos”. Enseguida se popularizó en los hogares argentinos “debido a lo sencilla que es su preparación y a que todo el mundo la sabe hacer”. Y así hasta hoy que ha conseguido este singular título internacional.
Aprovechando que la versión zaragozana es redonda, en Alma Criolla la ofrecen como si fuera una tapa (2,50 euros), en un vaso para degustar con una cucharilla, de abajo hacia arriba, de forma que al subir se recojan todas las capas. De momento, en este local la tienen de viernes a domingo, ya que a diario, hasta que la crisis sanitaria no dé un respiro, “la cosa está muy tranquila”, concluyen.
