Los conductores del tranvía inician su cuarto mes de paros parciales sin un acuerdo a la vista

Los trabajadores del tranvía de Zaragoza han retomado este lunes la huelga en el servicio como parte del conflicto laboral que mantienen con la empresa concesionaria por la negociación de un nuevo convenio colectivo. Tras una breve pausa en el calendario de movilizaciones, los conductores han vuelto a secundar unos paros parciales que comenzaron el pasado 5 de enero. De momento, las afecciones siguen siendo reducidas por los altos servicios mínimos decretados por el Ayuntamiento, que alcanzan hasta el 90%. Sin embargo, el acuerdo sigue lejano y ni siquiera hay prevista una reunión entre las partes.

Esta semana, los paros están planteados de 6.00 a 6.30, de 12.00 a 12.30 y de 17.30 a 18.00, y cada franja cuenta con unos servicios mínimos específicos: del 50%, 80% y 70% respectivamente. «Pone que viene dentro de 9 minutos, lo normal es que tarde 7», comentaba Carmen Almenara a las 12.15 en la parada de las Murallas Romanas. «No sabía que volvían a la huelga, pensaba que ya lo habían arreglado. Deberían resolverlo ya porque se empieza a hacer largo», advertía esta usuaria habitual del servicio.

Una sensación similar se transmitía, diez minutos después, en la plaza de España. «Se nota más gente esperando, pero ya no sabes si es por la huelga o por qué», apuntaba Carlos Millán mientras aguardaba un convoy al que le faltaban 8 minutos.

Desde el comité señalan que el seguimiento por parte de los conductores fue «total» y destacaron la unidad de la plantilla, aunque reconocieron que el conflicto está «enquistado». «La empresa ha roto las negociaciones, había una semana de margen para evitar estos paros y no quisieron dialogar, su actitud es inaceptable», manifiesta  Julián Aramendía como portavoz de los trabajadores. El representante sindical recuerda que «en el último pleno, todos los grupos municipales, por unanimidad, instaron a la empresa a negociar y no lo han hecho». En cualquier caso, se muestra confiado en que «recapaciten» para lograr un acuerdo «más pronto que tarde».

En cambio, fuentes de la empresa Tranvías Urbanos de Zaragoza reiteran su rechazo a la estrategia continuada desde el mes de enero de convocatorias sucesivas de huelga, recurriendo así constantemente al enfrentamiento, con una nula intención de crear el entorno adecuado para la negociación». La compañía considera que ya presentó «una propuesta más que solvente y adecuada a las reivindicaciones» que fue «rechazada frontalmente por el comité», al que insta a «reflexionar».

Los trabajadores del tranvía se unirán a los del bus, que mantienen su propio conflicto laboral con Avanza, en una manifestación el jueves para reclamar soluciones después de más de dos años de negociaciones sin acuerdo.