Fallece el bilbilitano Antonio Sánchez Portero, estudioso de la figura de la Dolores

Sus estudios durante varios décadas arrojaron certezas sobre esta mujer que luego se convertiría en mito.

Antonio Sánchez Portero en una fotografía de 2005
Antonio Sánchez Portero en una fotografía de 2005
José Miguel Marco

El bilbilitano Antonio Sánchez Portero ha fallecido este domingo a los 87 años de edad en Calatayud. Vinculado durante toda su vida a su ciudad natal, nació el 24 de marzo de 1934 y realizó la carrera de Comercio y se graduó como perito mercantil. Sin embargo, al margen de su profesión, lo que le ha caracterizado ha sido su labor investigadora y literaria alrededor de la figura de la Dolores. De hecho, fue fundador de la asociación cultural para dar relevancia a este personaje y el primer director del museo que se creó en las bodegas de la hospedería mesón a raíz de su restauración en 1999.El funeral será el martes 6 de abril, a las 12.00, en la iglesia de San Juan el Real de Calatayud

"Es una pena, porque ha sido un hombre tremendamente activo y muy querido en la ciudad, que ha dedicado un esfuerzo mayúsculo para colocar a la Dolores en el lugar que merecía", explicaba la concejal de Cultura del Ayuntamiento bilbilitano, Nuria Amela. Se refiere así a la investigación que realizó Portero durante décadas y que sirvió para arrojar certezas sobre la mujer que luego se convertiría en mito, situando su lugar de nacimiento en Calatayud en 1819. Fue también estrecho colaborador en la recreación histórica del siglo XIX 'La Dolores, un viaje en el tiempo', impulsada por El Juglar.

De hecho, entre su trayectoria literaria se cuentan obras como 'La Dolores. Algo más que una leyenda' (1998), 'La Dolores en coplas, canciones y poemas' (2001) y 'Dolores, la de Calatayud' (2002), en la que se sumergió en el ámbito del teatro. Al margen de esta especialización, Sánchez Portero ha formado parte del Centro de Estudios Bilbilitanos como consejero, a lo que ha añadido la publicación de centenares de artículos, crónicas, entrevistas y reportajes, colaboraciones en medios de comunicación y participación en conferencias y charlas.

Asimismo, colaboró puntualmente en HERALDO y en cabeceras como 'Amanecer', 'El Noticiero' y 'Hoja del Lunes', de Zaragoza; en las revistas 'Policía Municipal' y 'Serviam', y en el semanario local 'La Comarca'. También actuó como corresponsal de la revista 'Altavoz', de Madrid, del diario 'Pueblo' y del periódico 'El Día', de Zaragoza.

Entre sus trabajos, este bilbilitano también incluye una investigación sobre la autoría del Quijote apócrifo, que adjudicó a Pedro Liñán de Riaza, y tuvo una prolífica obra con una novela y varios cuentos sobre Calatayud. Entre estos últimos, se valoraba su estilo "entre costumbrista e ingenuo más que duro, estampas e historias que le han acompañado desde siempre y que forman su personal friso de Calatayud con algunas intuiciones certeras".

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