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Un estudio sobre deficiencias señala al Casco como el distrito de Zaragoza con más necesidades
Los problemas de accesibilidad, el mal estado de aceras y calzadas, y la presencia de suciedad son las cuestiones que más preocupan a los colectivos vecinales de la zona.
El ‘Estudio de necesidades de la ciudad de Zaragoza’ del año 2020, elaborado por la Unión Vecinal Cesaraugusta, señala al Casco Histórico como el distrito que más necesidades y deficiencias presenta.
El análisis, realizado a través de las asociaciones que integran a la Unión Vecinal, ha servido para generar una serie de mapas interactivos en los que se geolocalizan las necesidades de todos los barrios de la ciudad. El mayor número de deficiencias se ha detectado en la zona más antigua de la capital aragonesa, donde la accesibilidad, la limpieza y el estado de las aceras son algunas de las cuestiones que más preocupan.
Las asociaciones participantes han señalado deficiencias en las aceras de las calles Calatorao, Santa Isabel, Espoz y Mina y el lado par de San Blas; problemas de iluminación en Boggiero, Las Armas, Conde Aranda o la plaza San Felipe; y suciedad en vías como Josefa Amar y Borbón, Blancas, Urrea o Santa Catalina, entre otras.
“Calles como San Blas o Las Armas necesitan mejoras. Predicadores es para los amantes de las emociones fuertes, es como el París Dakar. No hay un metro cuadrado que esté en condiciones”, comenta María Luisa Verde, portavoz de la Asociación de Vecinos Zaragoza Antigua.
En el mismo sentido se manifiesta Iván Mestre, presidente de la Asociación de Vecinos Vía Romana. “Siempre hemos hecho hincapié en el adoquinado de las calzadas, porque cada dos por tres hay adoquines sueltos. Hay agujeros y cuando llueve se forman muchísimos charcos”, señala. Mestre es partidario de que el adoquinado se sustituya por un asfalto adoquinado, como ya se hizo en 2018 en la calle Espoz y Mina. “Siempre habíamos pedido que simplemente se asfaltara, pero lo que se hizo allí nos parece una buena opción”, añade.
Con respecto a la seguridad en la zona Verde reconoce “haber ganado algo”, aludiendo a la reciente instalación de cámaras en Pignatelli. “Hemos pedido que también pongan en la esquina del centro de salud con San Blas y en San Pablo con Cerezo”, apunta. Desde el Ayuntamiento de Zaragoza recuerdan que las primeras cámaras se instalaron con la intención de ver cómo funcionan. Dependiendo de los resultados, el consistorio podría plantear la colocación de más, aunque para ello se necesita la autorización de Delegación del Gobierno y que cumplan con unos requisitos ajustados a la ley de protección de datos.
Por último, demandan la construcción de un centro cívico y de un centro de mayores. “Hay que potenciar el Casco Histórico, pero es muy difícil en las condiciones en las que está. El mercado es un motor, pero no es suficiente”, considera Verde.
Caminando hacia la revitalización del Casco
Desde el área de Infraestructuras admiten que las necesidades en esta zona “son muchas” y afirman que se deben a “años de abandono y casi sin inversión”. Sin embargo, anuncian que la reforma de la calle Predicadores está prevista para este año y recuerdan que recientemente se ha renovado la plaza Jordán Asso y la calle Torrellas, dando más protagonismo al peatón.
Asimismo, en 2020 se llevaron a cabo unas 300 actuaciones de mejora del pavimento de las aceras del Casco, que incluyeron desde la reparación de baldosas sueltas hasta la renovación de tramos completos “para eliminar baches y mejorar la seguridad de conductores, motoristas y ciclistas”.
Además, “dentro del Plan de Intervención Urgente en el Viario Público que se puso en marcha durante el primer confinamiento y que se continuó en una segunda fase en verano, se han asfaltado íntegramente la calle San Juan y San Pedro y la calle Santa Ana o un tramo de Paseo María Agustín, entre Plaza Europa y Marie Curie”. También se están levando a cabo trabajos para renovar las tuberías de saneamiento de la calle Verónica.
En lo que a urbanismo se refiere, una de las primeras actuaciones que se llevará a cabo en este distrito es la reurbanización del entorno de la Iglesia de San Ildefonso y la plaza de San Lamberto. La intervención se enmarca dentro del Plan Especial de Protección y Mejora (PEPM) de Zamoray-Pignatelli, que incluirá la mejoras en el recorrido de Ramón y Cajal, Madre Rafols y Ramón Pignatelli; la urbanización del tramo de la calle de Agustina de Aragón entre Cerezo y Mayoral; mejoras de la urbanización superficial de la plaza de José María Forqué; la creación de dos pequeñas plazas en las calles Agustina de Aragón y Miguel de Ara; y la reurbanización de las calles de la Palma y Escopetería.
