coronavirus

Los hosteleros lamentan "otro mazazo" y defienden que bares y restaurantes no son foco de contagio

Aseguran que las nuevas restricciones anunciadas este sábado por el Gobierno de Aragón supondrán un duro golpe para unos negocios ya muy mermados

La nuevas restricciones de aforo y limitaciones de horario han caído "como un jarro de agua fría" al sector hostelero, que piden "medidas y ayudas" para poder trabajar. Muchos aseguran "que no les salen rentable" y ya piensan en el cierre.

No han pasado ni dos días desde que se estrenó el nuevo año y los hosteleros de Aragón ya se preparan para un nuevo paso atrás. Ante el aumento de los casos de coronavirus que se ha registrado en los últimos días, la consejera de Sanidad, Sira Repollés, ha anunciado la mañana de este sábado nuevas medidas restrictivas para el sector que han supuesto un jarro de agua fría. En Zaragoza, los propietarios de bares y restaurantes han recibido con perplejidad la vuelta a la restricción de aforos y al cierre obligatorio a las 20.00. Lamentan que todo esto supondrá un duro golpe para la facturación de sus negocios, ya de por sí muy mermada. Critican que se les está "demonizando" cuando, aseguran, sus locales no son un foco de contagio. 

"No entendemos nada -ha resumido esta mañana Mayte Barra, del restaurante Albarracín-. Estamos cumpliendo todas las medidas pero no nos dejan trabajar. Es lamentable". Para esta hostelera, la pérdida de servicio de cenas, que se recuperó hace apenas dos semanas, aunque a medio gas, supondrá otro "mazazo", ya que al menos estos días sus clientes tenían tiempo para hacer una merienda-cena al salir de trabajar. "La caja había subido un poco más, al menos para pagar algunas facturas", ha explicado. En este sentido, ha pedido que el Gobierno de Aragón implemente medidas sanitarias que posibiliten la apertura de estos negocios, ya que "no es donde se producen los contagios". De igual forma se expresaba, también en la calle de Cádiz, Daniela Correa, la gerente del restaurante Ham!, que abrió sus puertas hace aproximadamente un mes. "Nos fastidia mucho dar un paso atrás", ha criticado. 

Por poner un ejemplo, esta empresaria ha citado que la restricción de cuatro personas por mesa en el interior impedirá acudir a los establecimientos "a una familia con dos padres y tres hijos". Igualmente, en su negocio es por la noche cuando más caja se hace. "Somos muchas personas las que dependemos de esto y nos deja en la crisis a todos. No queda otra que aguantar, pero es muy difícil", ha sentenciado. También hay quienes creen que la prohibición de fumar en las terrazas tendrá un efecto disuasorio en los clientes. Así lo ha manifestado Claudio Carauso tras la barra del Café Chipre. "Esto no es normal y no sé lo que vamos a poder hacer, muchos negocios ya han tenido que cerrar", ha lamentado. 

De hecho, ya hay algunos empresarios que se plantean si "merece la pena" seguir abiertos con las nuevas restricciones. El propietario del restaurante Distrito 37, Juan Sarto, así lo ha asegurado. "En mi caso el volumen de facturación mayor es por las noches, habrá que pensar si sale rentable trabajar solo hasta las 20.00, solo con los desayunos y las comidas", ha expresado. También son muchos los trabajadores que salieron del ERTE tras la flexibilización de las restricciones y que ahora podrían tener que volver a entrar. Además, si se pone la vista en el futuro, los hosteleros lo atisban todavía demasiado negro, y algunos opinan que es cuestión de tiempo que las medidas se endurezcan todavía más  o incluso tener que enfrentarse a un cierre completo. La propia consejera de Sanidad ya ha advertido que si los datos no mejoran habrá que tomar acciones más severas. 

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión