El Pleno del Ayuntamiento de Zaragoza ha aprobado, por unanimidad, una moción de ZeC en la que se muestra todo el apoyo a la plantilla de Alumalsa en su "justa lucha" por el mantenimiento de los puestos de trabajo y la viabilidad de la factoría después de que la dirección haya anunciado el despido de 230 trabajadores, que es el 40 por ciento del total.

Esta unanimidad ha sido posible después de que ZeC retirara los otros dos puntos de la moción en los que se instaba al Ayuntamiento a llamar a la propietaria de Alumalsa, a presentar un plan de viabilidad para la planta de Zaragoza que garantice su futuro.

El otro punto retirado pedía instar al Gobierno de Aragón y en particular al Departamento de Industria, Competitividad y Desarrollo Empresarial a trabajar sin descanso hasta encontrar nuevos clientes para Alumalsa que aseguren carga de trabajo y garanticen la viabilidad de la factoría. Además, de instar al Gobierno de España a trabajar sin descanso hasta encontrar nuevos clientes para Alumalsa que aseguren carga de trabajo y garanticen la viabilidad de la factoría.

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El concejal de ZeC, Alberto Cubero, ha relatado que esta empresa dedicada a la fundición de piezas de aluminio, se funda en 1946 y desde entonces es una de las fábricas más importantes de Zaragoza, dando trabajo a cientos de personas y siendo además un referente del movimiento obrero de la ciudad.

Hace un año, la plantilla contaba con 760 trabajadores pero una reducción de la carga de trabajo provoca la pérdida de 200 empleos, a los que suma el ERE presentado por la empresa que implicaría la pérdida de 230 nuevos empleos, por lo que la factoría habría perdido en un año más de la mitad de plantilla, pasando de 760 a unos 300 trabajadores.

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Para Cubero se trata de un "drama" para estos trabajadores que se verían abocados a un futuro laboral "muy negro y un golpe terrible para la economía y la industria aragonesa que no podemos permitirnos".

Por ello, ha considerado que en una situación así, todas las administraciones públicas "deben trabajar de la mano" y hacer lo posible por evitar la consumación del ERE, para lo que deben implicarse en buscar nuevos clientes y proyectos que sustituyan a los que se han perdido. Ha alertado de que sin nuevos clientes y sin carga de trabajo, los despidos "serán inevitables" y el propio futuro de la viabilidad dé la factoría no estará asegurado.

Todos los demás grupos han mostrado su solidaridad con los trabajadores que van a ser despedidos y han confiado en que en la mesa de negociación se pueda mantener el mayor numero de empleos posibles.

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