La Policía Nacional detuvo en la madrugada del pasado jueves a un vecino de Borja de 35 años como presunto autor del robo de un taxi en Zaragoza. Según las primeras pesquisas, esta persona dio el alto al vehículo cuando circulaba por la calle de Conde Aranda y pidió a su conductor que lo llevara al McDonald’s de Los Enlaces. Sin embargo, una vez allí, lo condujo a un callejón sin salida y tras forcejear con él se marchó con el vehículo.

El robo se produjo a las 2.10 y dejó al taxista tirado en plena calle sin un teléfono con el que avisar al 091, ya que se lo llevó el delincuente. De hecho, el hombre no logró alertar a la Policía hasta que se cruzó con un compañero y le pidió ayuda. Sabedoras de lo ocurrido, varias patrullas iniciaron una batida por la zona y localizaron el taxi en la zona de La Camisera. Tenía las puertas abiertas, las llaves puestas, las luces encendidas y presentaba varias abolladuras en las puertas laterales.

Los agentes vieron por allí a una persona que salía de un aparcamiento próximo y que respondía a las características facilitadas por la víctima del asalto. Una vez identificado como Rafael G. G., se confirmó que, efectivamente, era el hombre que se había llevado el taxi. Entre otras cosas, porque al proceder a cachearlo los policías localizaron en sus bolsillos el móvil de la víctima y el dinero que le sustrajo.

El arrestado portaba también una bolsa con algo de marihuana, por lo que se le impuso una denuncia administrativa. Al preguntarle por los daños del taxi, el arrestado confesó a los agentes que no había bebido alcohol, pero había fumado cannabis y no tenía carné de conducir. De hecho, varias personas confirmaron que lo vieron circular de forma anómala por el garaje privado en el que fue detenido. Tras declarar el viernes en el juzgado de guardia asistido por Francisco Antoranz, del despacho Ariza Abogados, quedó en libertad con cargos..